¿Ya os había dicho que me encantan las legumbres?… Pues eso, me encantan las legumbres, en todos sus colores, formas y sabores que se prestan para tener un montón de platos diferentes, y muy importante, me gusta disfrutar de todos los beneficios que aportan a nuestro organismo.
Esta vez, he encontrado en el herbolario unas legumbres que se llaman: -Azuki-, yo particularmente hace un tiempo no sabía de su existencia, me puse a leer sobre sus propiedades y quede gratamente sorprendida, ya cuando las probé quedé enamorada ¡no podía ser de otra forma!.
Esta vez quise prepararlas con un toque entre dulce y salado, ya que tradicionalmente en algunos lugares como Japón lo usan en repostería y pensé que el contraste salado/dulce quedaría fenomenal, a los invitados de la casa y a mi nos han encantado, espero que a vosotros también.
Con este plato podemos tener beneficios para nuestro cuerpo, dentro de los que podemos destacar:
Rico en fibra, lo que nos ayuda a controlar los procesos intestinales
Gran cantidad de vitaminas del grupo B favoreciendo los procesos de desintoxicación
Controla los niveles de insulina en sangre
Gran cantidad de minerales como fósforo, hierro, magnesio ayudando a fortalecer nuestro sistema inmune
Características
Almuerzo completo
Rico en proteínas vegetales
Vegano
Fuente de vitaminas y minerales
Rico en fibra
¿Qué uso?
1 taza de azuki remojadas en agua y vinagre de manzana por toda la noche o por un par de horas
1 pimiento rojo grande
1 cebolla blanca grande
2 cdas de azúcar de abedul
sal al gusto
1 cda de eneldo seco
cebollino fresco
2 cdas de aceite de oliva virgen extra (AOVE)
4 tazas de agua
¿Cómo hago?
Lavar las azuki con abundante agua nueva (si el agua está templada mejor)
Agregar las 4 tazas de agua en una olla grande y llevar a ebullición
Cuando suelte el primer hervor agregar la sal y el eneldo, remover y dejar hervir nuevamente
Cuando vuelva a soltar el hervor agregar las azuki ya lavadas junto con el cebollino, remover y dejar cocinar por 1 hora aproximadamente a fuego medio (recomiendo mantener la olla tapada y remover de vez en cuando con una cuchara de madera, si es necesario agregar más agua hirviendo si se están quedado muy secas)
Faltando 15 minutos para la completa cocción de las azuki:
Picar el pimiento y la cebolla en julianas ni muy finas ni muy gruesas intentando que queden del mismo tamaño para que se cocinen por igual
En una sartén mediana agregar el AOVE y calentar
Cuando el AOVE esté bien caliente agregar las julianas de pimiento y de cebolla, sofreír por un par de minutos a fuego lento
Incorporar el azúcar de abedul, remover, tapar la sartén y dejar cocinar por 10 minutos más a fuego lento
Pasado el tiempo de cocción de las azuki:
Pasar por un colador de malla fina para quitar el exceso de caldo (reservar el caldo para cocinar un arroz o para hacer una sopita con vegetales)
Servir las azuki en una fuente honda, agregar los vegetales caramelizados en el centro y un tilín de cebollino recién cortado
Y el paso a paso aquí:
Si no tienes azúcar de abedul puedes usar azúcar panela o también azúcar de coco (solo que ésta última le cambiará un poco el sabor original), si no tienes eneldo seco puedes usar el fresco y quedará aún más rico de sabor. La sal que recomiendo es la sal rosa del Himalaya pero si no la tienes a mano puedes usar un sal que no este tan refinada.
Conciencia y coherencia con lo que hacemos y lo que queremos
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