BIZCOCHO DE CALABACÍN Y ZANAHORIA con frutas escarchadas, un dulce muy jugoso, estupendo para postres, desayunos y meriendas.
Estamos en época de frutas y verduras, por lo tanto es un buen momento para elaborar un montón de recetas utilizando estos alimentos tan saludables.
Al hablar de hortalizas se nos vienen a la cabeza platos salados, pero es sorprendente el buen resultado que se obtiene con ellas en preparaciones dulces.
Tengo la suerte de poder consumir productos de la huerta, cultivados sin ningún tipo de productos químicos, y llegado el verano recolectamos un poquito de todo: pimientos, tomates, cebollas, zanahorias, calabacín, berenjenas, etc. Por lo tanto pongo las neuronas a funcionar para comer a diario, todos estos manjares, cocinando entrantes, primeros y segundos platos, y como no, postres.
Ya tengo publicado un Bizcocho de zanahoria y coco, aromatizado con agua de azahar, que está delicioso. Esta vez he elegido otras dos hortalizas de temporada, calabacín y zanahoria, para preparar otra exquisitez.
En principio mi idea era hacer un bizcocho de calabacín, como también tenía zanahorias decidí poner las dos. Fue todo un acierto, ha resultado un bizcocho muy jugoso, que si se le da tiempo, dura varios días como recién hecho.
He añadido frutas escarchadas y tengo que decir que es la primera vez que no se me van al fondo, estoy súper contenta, ¡¡he triunfado!!
INGREDIENTES:
200g de calabacín
200g de zanahorias
300g de harina con levadura (para bizcochos)
200g de azúcar
150g de frutas escarchadas
250ml de aceite de oliva suave
4 huevos
PREPARACIÓN:
Engrasar y enharinar un molde o forrarlo con papel sulfurizado.
Tamizar la harina.
Pelar y rallar el calabacín y las zanahorias.
Picar las frutas escarchadas en dados pequeños.
Precalentar el horno a 180º.
Batir los huevos con el azúcar hasta que doblen su volumen, añadir el aceite y mezclar bien.
Agregar la harina con levadura y remover hasta que esté totalmente integrada.
Incorporar las hortalizas, revolver de nuevo para incorporarlas a la masa.
Pasar por harina las frutas escarchadas y sacudir el exceso. Añadirlas a la preparación y dar un par de vueltas para repartirlas por todo el bizcocho.
Hornear 30/40 minutos, depende de cada horno.
Una vez hecho retirar y enfriar sobre una rejilla.
Terminado nuestro bizcocho de calabacín y zanahoria podemos degustarlo en cualquier momento del día.
Que aproveche!!!
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