Como elaborar buñuelos de viento con nata (crema de leche)
Otra vez no he podido resistirme a traeros una receta dulce, mas en concreto éstos buñuelos de viento, cuando llega el mes de noviembre aparecen como por obra de magia en todas las pastelerías para celebrar el día de todos los santos, aunque en otras zonas de nuestro país también los podemos encontrar en Carnaval o Cuaresma.
Nuestra gastronomía es tan rica que tenemos recetas dulces para casi todas las celebraciones importantes y estaciones del año, al igual que los buñuelos, los huesos de santo o los panellets también están muy ligados a ésta celebración del día todos los santos y los podemos encontrar en cualquier rincón de España.
Su elaboración es sencilla, se trata de una masa similar a la choux, es decir con harina, huevos y mantequilla, pero a diferencia de ésta, los buñuelos se fríen en abundante aceite en lugar de hornear. Se llaman de viento porque al freírse se ahuecan y se hinchan llegando incluso a duplicar su tamaño.
En éste caso los he rellenado de nata (crema de leche), además de porque son mis favoritos, porque me ha sido materialmente imposible sacar tiempo para prepararlos de crema pastelera, mi otros gran predilectos, pero podéis rellenarlos con chocolate, trufa, cabello de angel, incluso de como éstos buñuelos de lemond curd.
IMPRIMIR
INGREDIENTES
125 g. Leche
125 g. Agua
200 g. Harina
100 g. Mantequilla
6 Huevos M
1 Pizca de sal
La piel de un limón
Aceite de girasol
Azúcar glas para espolvorear
400 ml. Nata montada (crema de leche)
ELABORACION
En un cazo ponemos el agua, la leche, la mantequilla y la pizca de sal y llevamos a ebullición.
Cuando comience a hervir, añadimos la harina de golpe y removemos hasta que la masa se vuelva lisa y se despegue de las paredes. Apartamos del fuego y dejamos que pierda un poco de temperatura.
Incorporamos uno a uno los huevos, no añadiendo el siguiente hasta que el anterior esté completamente integrado. Repetimos éste proceso hasta terminar con todos.
Ponemos abundante aceite en una sartén junto con la piel de limón, una vez dorada ésta retiramos.
Con una cucharita cogemos pequeñas porciones de masa y la dejamos caer con cuidado sobre el aceite caliente, ayudándonos con un dedo.
Dejamos dorar los buñuelos y sacamos a un plato con papel de cocina, así hasta terminar con la masa.
Una vez fríos, rellenamos con la nata montada (crema de leche) y espolvoreamos con azúcar glas.
Es muy importante la temperatura del aceite, que deberá estar humeante pero no en exceso para evitar que se doren rápido y no se hagan por dentro. Además no se debe escatimar en aceite a la hora de freir los buñuelos, ya que si la masa está bien hecha se inflaran y darán la vuelta por ellos mismos y necesitan suficiente espacio para poder hacerlo. Espero que os animéis a preparar vuestros propios buñuelos.
Feliz día de todos los santos
Fuente: este post proviene de Yerbabuena en la Cocina, donde puedes consultar el contenido original.
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