No es ningún secreto que éste es el post que más ilusión me hace del año, junto con el del cumpleaños de Arnau. Y no es que les haga unas súper fiestas a mis hijos, pero las hago con mucha ilusión. Pienso en el momento en que lo ven todo montado y se les escapa una sonrisa de “qué guay!!” y es en ese preciso momento en que yo también pienso “qué guay!!”.
La fiesta de Carla la hicimos en casa con la familia, con los abuelos y los tíos (8 adultos y 4 pequeños), así que fue algo sencillito.
La temática “bajo el mar” la decidí después de ver lo mucho que disfruta Carla en el agua, le iba cómo anillo al dedo. Busqué los colores complementarios del azul turquesa y me sorprendió lo bien que queda junto con el lila y el amarillo.
La decoración la hicieron prácticamente toda los niños. Carla se encargó de pintar unos dibujos que le imprimí de animales marinos y que posteriormente recorté. Los colgué en una red que compré en la tienda Muy mucho. Es algo muy sencillo pero que te transporta inmediatamente al mar.
Arnau se encargó de hacer los pulpitos con rollos de papel de WC y de cocina. Los pintó con pinturas y les enganchamos los ojos. Cortamos los tentáculos con una tijera irregular y quedaron muy simpáticos.
También en Muy mucho compré la botella azul en forma de pez, es preciosa como decoración y no sólo para el cumpleaños.
El resto de decoración son conchas y algas marinas que teníamos por casa.
Como todo fondo marino no podía faltar un cofre con su tesoro. Las monedas de chocolate quedan muy divertidas y como tenía dos cofres, aproveché para poner en el segundo unas chuches de conchas marinas.
Mi madre hizo una tarta de riccota espectacular que decoré con unos toppers personalizados.
Me animé con unas cookies americanas con Lacasitos, aunque se me resistieron un poco y no fue hasta la segunda horneada que quedaron bien. Por no mencionar el problema que tengo con Arnau y con Carla con los Lacasitos… desaparecen!!
Para picar compré gusanitos, porque los peces comen gusanitos jaja, y galletitas saladas de peces.
El pastel para mí fue todo un reto por ser la primera vez que lo hacía. Me animé con un Blue Velvet, que no es más que la versión azul del Red Velvet. El color no quedó azul turquesa como el del bote, más bien era un tono verdoso, pero que iba perfecto con la temática marina. Decoré la parte superior con moras y aranditos y los laterales con unas figuritas de azúcar que encontré por casualidad en Gadgets & Cuina. En unos días os dejaré la receta de la Blue Velvet por aquí.
Aunque no soy muy amiga de las gominolas, siempre me gusta poner alguna del mismo color de la fiesta. Encontré las conchas marinas que os comentaba antes, unos delfines azules, moras azules, platanitos y unas fresitas lilas. Aproveché unas vieiras que tenía mi madre para usarlas de recipiente y darle un toque original.
Utilicé el dispensador de limonada para que los invitados se sirvieran ellos mismos la limonada. Compré horchata, que suele apetecer mucho en verano y la quería meter en botellitas, pero con las prisas se me fue el santo al cielo.
Globos de colores, nidos de abeja y guirnaldas no faltaron. Aunque olvidé poner la guirnalda principal “Carla 2” que hice de pescaditos y que quería colgar de hilos como si fuera la pesca. Menuda memoria la mía!! Arnau colocó a un lado de la mesa el globo grande del 2, no tenía pensado en absoluto ponerlo allí, pero lo hizo con tan buena voluntad que no quise cambiarla de sitio.
Éste año no faltó la corona con su número. La hice de fieltro sencilla, si hubiera contado con un poco más de tiempo quizás se la hubiera personalizado un poco más. Esperaba ponérsela por lo menos para una o dos fotos, pero Carla me sorprendió porque no se la quitó en toda la fiesta. Eso sí, se la puso a su estilo y no hubo manera de colocársela bien
Espero que os guste y os inspire. Cualquier duda, os contesto encantada.
Un beso!!
Fuente: este post proviene de Los mundos de Noe, donde puedes consultar el contenido original.
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