¡¡Hola!!
Hoy otra salsita, es que el tema de las salsas me gusta cada día más. Como ya os comenté hace unos días, las primeras salsas se hacían con los intestinos de pescado en salmuera allá por la época romana. Más adelante (hablamos de la Edad Media) se limitaban a recoger los jugos que soltaban los alimentos y añadirles algún ingrediente para emulsionar o ligarla un poco. Pero en realidad, el motivo principal del auge de las salsas era enmascarar el sabor de los alimentos que (obviamente) sin la posibilidad de conservarlos en frío se estropeaban con mucha facilidad. Como no hay estadísticas de esos siglos no podemos saber cuántos infelices se quedaron por el camino después de un asado de la época, eso si, cubierto de salsa!
Pues la salsa de hoy no tapa nada, todo lo contrario porque es fantástica para acompañar cualquier tipo de carne de cerdo, pollo o ternera e incluso a veces también la he hecho para un plato de pasta.
Reconozco que sobre setas y hongos soy un poco limitada, sólo me gustan los champiñones y las setas de cardo, así que para los amantes de las setas, barra libre! En esta salsa podéis meter las que más os gusten (se hace exactamente igual pero el sabor será algo diferente). Ah, y no es fácil, es lo siguiente!
A ver si os gusta:
Ingredientes:
- 1 cebolla grande
- 400 gr. de setas
- medio vasito de jerez seco
- 200 ml. de nata (crema de leche) líquida
- 1 vasito de leche evaporada
- sal y pimienta negra
- cebollino picado
- aceite de oliva virgen extra
- chuletas de aguja cerdo (o lo que queráis)
Elaboración:
Cortamos la cebolla y la sofreímos en una sartén con aceite de oliva virgen extra. Troceamos las setas y se las añadimos cuando la cebolla esté medio hecha. Sazonamos con sal y pimienta y dejamos hacer hasta que las setas estén hechas.
Ahora añadimos el jerez y dejamos que reduzca un poco.
Para terminar ponemos la nata (crema de leche) y la leche evaporada, dejamos unos cinco minutos al fuego y lo trituramos todo.
Hacemos la carne elegida a la plancha y a la hora de servir la salsa le ponemos un poquito de cebollino picado por encima.
¡Hasta mañana!
Fuente: este post proviene de Con tu Pan te lo Comas, donde puedes consultar el contenido original.
¿Vulnera este post tus derechos? Pincha aquí.
Modificado:
