Como ya os dije el otro día que hice las berenjenas con tomate y queso gratinado al horno me apeteció acompañarlo con una Focaccia con cebolla y romero y aunque esta mal que lo diga yo. Estaba riquísima!! hasta ahora una de las mejores que he comido, no se si sera porque la hice con tantas ganas o fueron los ingredientes, claro que lo que no me cabe duda alguna es el toque final, con un buen chorreón de aceite del pueblo, de ese tan bueno que su sabor te llega a todos los sentidos.
Vamos con la receta y si os apetece la probáis.
Ingredientes:
475 gramos de harina de trigo de fuerza
300 ml. de Agua
25 gramos de levadura fresca Levital
25 gramos de aceite de oliva virgen
+ un extra para después de hecha
* Una cucharadita de orégano
* Una cucharadita de azúcar
* Dos cucharaditas de sal
Media cebolla morada
Una rama de romero
Sal negra en escamas (De luxe)
*Cucharadita de postre
Preparación:
Echamos el agua en el vaso yo utilizo siempre de osmotic, se recomienda esta o embotellada el resultado es totalmente diferente a la del grifo, calentamos a 37º/1 min./ vel.1.
Añadimos la levadura y la azúcar y mezclamos 5 seg./ vel.3.
Añadimos la harina, la sal, el orégano y el aceite de oliva, mezclamos 15 seg./ vel.6.
Bajamos los restos del vaso hacia abajo y programamos 3 min./ vel. espiga sin el cubilete puesto.
Sacamos la masa y formamos una bola y la ponemos en un bol untado con unas gotas de aceite, tapar con un paño húmedo mejor en agua muy caliente y mantener en una zona templada en mi caso calenté el horno a 40º, lo apague y metí el bol, dejar reposar 30 minutos.
Espolvorear un poco de harina encima del mármol y amasar unos cinco minutos, esto ayudara a expulsar los gases.
Estiramos y ponemos en la bandeja del horno, echamos un chorito fino de aceite por encima y extendemos con las manos y con los dedos apretaremos un poco y dejaremos las marcas, como si fueran unas hundiduras.
Echamos la cebolla que habremos cortado en juliana, repartimos las hojas del romero por encima y esparcimos unas escamas de sal negra por encima.
Ahora dejamos reposar 45 minutos con el paño húmedo por encima.
Precalentamos el horno a 170º si tenéis ventilador, si no es así y tenéis el horno sin ventilador tenéis que ponerlo a 190º durante veinticinco minutos en ambos casos.
Nada mas sacar del horno, ser generosos y no escatiméis en echar un chorito de aceite por encima de la masa, yo a los cinco minutos eche otro poco, dejar enfriar y lista para comer.
He de deciros que yo cenando me comí un buen trozo y estaba algo templada porque no pude esperar mas a probarla y después de dos días un trocito que quedaba, aun estaba muy esponjoso.
Espero que la probéis, estoy segura de que os va a encantar.
Que aproveche y buen fin de semana!!
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