Es una especialidad que se sirve mucho en los restaurantes como tapa, sobretodo en la zona sur del país. Si no la habéis probado nunca (cosa que dudo) os animo a hacerla, seguro que os aficionaréis como yo ;)
Aunque la receta básica se elabora con gambas, ajo y aceite, existen diferentes versiones que le añaden otras especias, por ejemplo para hacerla un tanto picante le podemos agregar un poco de guindilla. Hay quien le añade un poco de jerez o incluso las combina con champiñones, almejas... La receta que hoy os traigo es sencilla y clásica, sin ningún producto especial añadido.
Ingredientes
200 gr. gambas peladas
2 dientes de ajo
1 o 2 cucharadas de aceite de oliva
Sal
Pimienta y perejil (opcional)
Pasos a seguir
Pelamos los ajos y los cortamos en láminas muy finas. Los añadimos en una sartén con el aceite a fuego medio. Los doramos ligeramente.
Pelamos las gambas, en el caso de ser frescas. También podemos utilizar congeladas pero deben estar bien escurridas y descongeladas.
Agregamos las gambas a la sartén y las rehogamos bien. Finalizamos con la sal, la pimienta y el perejil.
¡Y ya tendremos listas las gambitas para servir! Prepara un poco de pan, porque seguro que van a querer mojarlo en el aceitito de ajo
Las gambas podemos ponerlas enteras o bien, como yo he hecho, cortarlas en trocitos más pequeños.
Algo muy importante a tener en cuenta para que nos quede bien la receta es incorporar las gambas bien escurridas, pues de ello dependerá el resultado final.