¿Cuántas veces hemos dicho y oído esta expresión a lo largo de nuestra vida? Seguro que millones de veces. Entonces yo me pregunto, ¿por qué nos empeñamos en hacerlas desparecer de nuestro rostro a base de tanta cirugía estética?
Yo no estoy en contra de que nos cuidemos, todo lo contrario. A mí me encanta cuidarme y ponerme los todos potingues del mundo para el cuidado de mi cuerpo. Me parece fantástico hacer deporte para mantener la figura. Bueno que lo haga el que quiera que yo soy y siempre he sido no un poco vaga, sino vaguísima para eso.
No me he podido resistir a poder esta foto, jeje
Pero con lo que no comparto, que no es que esté contra, cada uno es libre, es de la cirugía estética. Me refiero a cirugía estética, como medio cosmético y no a esas cirugías que ayudan a gente que de verdad la necesita.
Quede por delante que respeto a todas las personas que recurren a ella para sentirse mejor, pero si he de ser sincera, no lo entiendo. Y ojo que no es cosa de mujeres, cada vez más y más hombres recurren a la cirugía para botox, liftings, implantes de pectorales, etc.
Antes de que no estuviese en pro esta técnica, había mujeres bellísimas tanto del mundo del celuloide como de a pie que se cuidaban con remedios de toda la vida y supieron envejecer llevando con orgullo esas arruguitas. ¿Por qué ahora no nos vale eso?
Sin cirugía, ¡menudo cambio!
Las arruguitas fastidian cuando las descubres, y mucho, pero si te paras a pensar son signos de la vida. Esas patas de gallo que nos salen al sonreír, la arruga del entrecejo de cuando nos enfadamos o las arruguitas del labio superior de dar besos. ¡Lo malo sería no tenerlas!
Emma Thompson, 54
Susan Sarandon, 67 años
Helen mirren, 68 años
Pero claro, normalmente no vemos eso, vemos que nos hacemos viejos y
nos entra el pánico. Y cuando cremas, mascarillas y toda esa sabiduría hereditaria que todos conocemos nos falla, algunos se plantean el quirófano. Si Demi Moore está así de estupenda, ¿por qué yo no?
Demi Moore, 51 años
Catherine Zeta Jones, 44 años
Patrick Dempsey, 48 años
Tras pasar por el bisturí, esas marquitas desaparecen, pero a mí eso me da mucho respeto (sí, miedo). Además, con tanta cirugía, si os fijáis todas las que recurren a ella, bajo mi punto de vista, se parecen. Parecen mujeres en serie, como las muñecas, pierden su sello personal. O peor aún, quedan peor de lo que estaban. La cirugía no es una ciencia exacta.
Y ¿sabéis lo peor? Que lo que vemos en las revistas, lo perfectas que están todas, lo que nos hace plantearnos la cirugía, suele ser mentira. Bueno, mentira no, photoshop. Pero ahí que vamos nosotros y nos lo creemos. Parece que los editores de revistas, tienen algún tipo de fobia extraña a las arrugas o a las redondeces y ¡zas! Las borran con el programita.
¿De verdad eran necesarios algunos de estos retoques?
Vuelvo a repetir que yo respeto a toda aquella persona que se la hace. Pero ya sea por convencimiento propio, miedo a los quirófanos, a los resultados, por lo caro que es o por una gran mezcla de todo esto, como que eso no va conmigo. Yo he tenido que pasar por quirófanos por obligación y la verdad es que me cuesta entender pasar por eso por gusto.
¿Cuál es vuestra opinión? ¿Cirugía sí o cirugía no? ¿Os lo habéis planteado alguna vez?
Un beso y hasta el próximo día.
P.D.: Como veis me he acordado de todos los que me dijisteis que os gustaron los morphs ;)
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