Panna Cotta | Flan de nata (crema de leche) (sin huevo)

La panna cotta es como un flan con un matiz lácteo. Es una receta cuyo origen se le atribuye a Italia, a principios del siglo XIX, en que había un excedente de leche y una mujer de origen húngaro lo aprovecho creando esta delicia. Su nombre traducido literalmente del italiano significa “nata (crema de leche) cocida”. Es ideal acompañarlo de una salsa o una compota de frutas, petazetas, almendra tostada triturada o también con caramelo, chocolate… Suele servirse fría en vasitos individuales. Como no lleva gluten es ideal para los celíacos. Podemos adaptar esta receta a cualquier persona, bien sea diabética, intolerante a la lactosa, vegana.







Versión en PDF:          Panna cotta CEN

Dedicación:                        10 minutos

Tiempo de Cocinado:           5  minutos. +. 5. horas de enfriado en nevera

Cantidad:               5  panna cottas
 

 

 

Ingredientes

250 ml de leche

250 ml de nata (crema de leche) para montar (crema de leche)

50 g de azúcar

3 hojas de gelatina

Esencia de vainilla

250 g de mermelada

Almendras tostadas o petazetas

   Preparación

Comenzamos poniendo a hidratar la gelatina. Si es en hojas se hidrata en un poco de agua fría y si es en polvo o agar agar en unos 100 ml de leche.

En un cazo ponemos a calentar la nata (crema de leche) y la leche, añadimos unas gotas de esencia de vainilla y el azúcar y mezclamos. Cuando rompa a hervir, apagamos y añadimos la gelatina escurrida si es en hojas o la hidratada si es en polvo. Removemos y apartamos del calor, removiendo un poco más para que pierda un poco de calor.

Vertemos la mezcla en los vasos o copas individuales y dejamos enfriar en el frigorífico hasta que cuaje (unas 5 horas). Si queremos hacerle un dibujo con forma inclinada, hacemos una especie de canal con unos paños de cocina y colocamos los vasos medio de lado.

Una vez cuajada la panna cotta, la acompañamos en esta ocasión de una salsa de frambuesa: Ponemos en un recipiente 4 cucharadas de mermelada de frambuesa y añadimos dos de agua. Calentamos al baño maría o 40 segundos en el microondas y removemos hasta que quede una salsa más ligera. Dejamos que se temple un poco, retiramos las panna cottas del frigorífico y vertemos sobre la superficie. Si la capa de frambuesa es fina, se solidificará con el frío de la panna cotta y podremos servirla acompañada de unas almendras tostadas trituradas o unos petazetas.
   

   

Consejos y trucos para hacer esta receta  

El origen de la panna cotta se le atribuye a Italia, a la región del Piamonte. A principios del siglo XIX, había un excedente de leche y una mujer de origen húngaro lo aprovecho creando esta delicia. Esta receta a su vez procedía de otra más antigua, y se utilizaba una gelatina que se obtenía de hervir las colas de pescado. Su nombre traducido literalmente del italiano significa “nata (crema de leche) cocida”.

Es ideal acompañar a la panna cotta de una salsa o una compota de frutas como frambuesas, fresas, mango, frutos rojos. También la podemos acompañar con petazetas, almendra tostada triturada, caramelo, crema inglesa, chocolate, nata montada (crema de leche), frutas frescas… Suele servirse fría en vasitos individuales
    Esta receta es ideal para los celíacos pues todos sus ingredientes son sin gluten.

La panna cotta o panacota puede adaptarse a todos los paladares.

Puede hacerse sin lactosa utilizando nata (crema de leche) y leche sin lactosa leche de almendra o coco.

Para los diabéticos también se puede cambiar el azúcar por edulcorante.

Para los veganos y vegetarianos además de utilizar leche de almendra o coco y edulcorante, para espesar pueden utilizar agar agar, gomas vegetales o almidón de tapioca.

 

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