Esta semana he decidido utilizar un trozo de masa que tenía guardado desde hace algún tiempo en el congelador y que me sobró después de haber hecho unos pasteles.
Como la masa ya estaba hecha la receta de hoy fue súper rápida y con un resultado bastante aparente. Baste decir que hice una bandeja de horno y después de cenar, entre tres, sólo dejamos media docena y porque ya no nos cabían.
Os dejo la receta para una cantidad mucho mayor y si sobra se conserva perfectamente congelada. Repartidla bien enrollada en film transparente.
Ingredientes:
300 grs. de mantequilla
1 huevo XL
1 pizca de sal
150 grs. de azúcar glass
450 grs de harina de repostería
1 limón (la ralladura).
Chocolates negro y blanco para fundir
Frutos secos.
Elaboración
Encendemos el horno a 180ºC.
Batimos la mantequilla con el azúcar hasta blanquear. Incorporamos la ralladura de limón y el huevo. Continuamos batiendo y añadimos la sal y la harina tamizadas. Continuamos removiendo hasta que todo quede hecho una masa homogénea.
Ponemos la masa entre dos papeles de horno y estiramos con el rodillo hasta obtener una masa fina. Con un cortador de galletas le damos la forma a nuestras pastas y las ponemos sobre un papel de hornear en una fuente de horno.
Cuando apenas tengan un leve color dorado las sacamos y colocamos en una rejilla para que vayan enfriando.
Una vez frías las decoramos con chocolate, yo utilicé chocolate negro y blanco y sobre estos diferentes frutos secos.
Que las disfrutéis.
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