Profiteroles de crema

Receta para hacer profiteroles de crema

Los profiteroles, o también llamados petisús, son unos pequeños pastelitos que se elaboran con pasta choux. Según el país en el que nos encontremos, el relleno puede cambiar. En España esta elaboración se suele servir como un postre, rellenos de crema pastelera o chocolate, y normalmente cubiertos por una fina capa de chocolate. En otros lugares, los profiteroles forman parte de algunas comidas, y pueden encontrarse rellenos de ingredientes salados como el queso.
A pesar de su sofisticado aspecto, estos petisús no son nada complicados de preparar, aunque sí algo laboriosos, sobre todo si queremos tomarnos la molestia de preparar en casa una deliciosa crema pastelera con la que acompañarlos. Merece la pena el esfuerzo, y, ya que la hacemos, podemos preparar más cantidad de la que indica la receta y usarla para elaborar otros ricos dulces, como unas deliciosas caracolas rellenas de crema pastetelera. Si no queréis, o no podéis dedicar tanto tiempo a esta receta, os animo a que preparéis al menos los profiteroles (sin el relleno), para servirlos como aperitivo durante una cena, rellenos, por ejemplo, con un poco de tomate rallado y jamón serrano, queso tierno, pesto, etc.
No recuerdo cuando fue la primera vez que probé unos profiteroles, pero de lo que sí estoy seguro es de que eran comerciales, muy inferiores en sabor, aroma y textura a los de esta versión casera. Además, esta receta está elaborada con ingredientes sencillos y económicos que están al alcance de cualquiera, por todo ello; ¿se os ocurre algún motivo para no hacer esta receta? ¡¿En serio?! ¡Seguro que no!
¿Ya tenéis el delantal puesto y todos los ingredientes preparados? ¡Daos prisa, que empezamos!Vídeo de la Receta

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Ingredientes [Para 12 unidades]:

Huevo - 2 unidades
Harina de trigo - 70 gramos
Mantequilla - 50 gramos
Sal - una pizca
Azúcar - una pizca
Leche - 62 gramos
Agua - 62 gramos
Crema pastelera - 200 gramos
Azúcar glas - para decorarElaboración de la Receta

Para la elaboración de esta receta necesitamos preparar, en primer lugar, la crema pastelera. La podemos hacer unas horas antes, para que tenga tiempo de enfriarse antes de rellenar con ella los profiteroles, o, gracias a su gran conservación, podemos prepararla varios días antes de necesitarla.
Una vez que tenemos el relleno, preparamos la masa. Para ello, tamizamos la harina en un cuenco con la ayuda de un colador.
Una vez tamizada, añadimos al cuenco la sal y el azúcar y mezclamos.
En una olla, ponemos a calentar el agua, la mantequilla y la leche. Cuando rompa a hervir, añadimos la harina tamizada y mezclamos con una espátula o cuchara de madera hasta que se forme una masa de textura uniforme que se separe de las paredes de la olla.
Apartamos la olla del fuego y añadimos los huevos de uno en uno. Tras añadir cada huevo, mezclamos con una varilla para que éste se integre en la masa. Terminamos de trabajar la masa con una espátula de silicona.
Precalentamos el horno a 180ºC.
Cuando la masa esté lista, la metemos en una manga pastelera. Cortamos la punta de ésta, y, sobre una bandeja de horno forrada con papel vegetal, formamos profiteroles del tamaño de una pelota de golf.
Metemos la bandeja al horno y horneamos, a 180ºC, con calor arriba y abajo, durante 18-20 minutos o hasta que la superficie de los profiteroles adquiera un bonito y ligero dorado. No deben coger mucho color.
Sacamos la bandeja del horno y transferimos los profiteroles a una rejilla metálica donde dejamos que se enfríen por completo antes de rellenarlos.
Cuando ya estén fríos, metemos la crema pastelera en una manga y, tras cortar los profiteroles por la mitad, los rellenamos con crema. Si lo deseamos, podemos espolvorear un poco de azúcar glas justo en el momento de servirlos.

Anotaciones y Consejos

Los profiteroles que no consumamos en el momento de ponerles el relleno, debemos guardarlos refrigerados.
Podemos rellenarlos con otras cremas, mermeladas, ingredientes salados o lo que nos apetezca. ¿Os imagináis uno relleno de helado bien frío y servido acompañado de chocolate caliente?? ¡Dios!
Para rellenarlos no es necesario cortarlos por la mitad. Haciendo uso de una manga pastelera, con una boquilla fina, podemos practicar un pequeño agujero en un costado del profiterol e inyectar el relleno a través de éste.
Además de espolvorearlos con azúcar glas, también los podemos cubrir con un poco de chocolate fundido.