Aunque sólo sea día 22 hoy es el último domingo del mes, y como siempre tenemos reto del Asalta blogs. En los últimos tiempos tengo muy poco, más bien nada, de tiempo para visitar otros blogs, por lo que el reto me permite visitar por lo menos al mes un blog con más detenimiento. Este mes le ha tocado a la Rosa Dulce, y, aunque en principio estuve a punto de realizar una receta salada, al final me decanté por este pudin de queso y galletas. Me sorprendió que no llevase pan ni bollería el pudin sino galletas, y me gustó mucho la idea. Para nada nos ha defraudado esta combinación, que ha gustado mucho en casa y que es rápida de preparar.
INGREDIENTES:
5 huevos3 vasos de leche (de los de 250 ml)300 gr. de queso crema8 cucharadas soperas de azúcar14 galletas (yo puse de las que tenía a mano, las Tosta Rica, que son las que toma Hugo habitualmente)Azucar y unas gotas de zumo de limón para caramelizar el moldeNata para montar y unas grosellas para decorar
PREPARACIÓN:
He usado un molde tipo plum cake de 25x11x7. Lo primero que haremos será caramelizar el molde, para ello ponemos en un cazo azúcar con unas gotas de zumo de limón y dejamos a fuego bajo hasta que se derrita y se forme un caramelo ligero. Vertemos el caramelo en el molde procurando que la base quede cubierta con él. Reservamos mientras preparamos el pudin.
Encendemos el horno a 180ª, preparamos una fuente de horno con agua, donde quepa después nuestro molde y podamos hacer el baño María. Batimos todos los ingredientes del pudin hasta integrar todo. Yo lo he hecho en la batidora de vaso, pero podéis hacerlo también en una batidora de brazo, o en un robot tipo Thermomix. Vertemos la mezcla en el molde y horneamos hasta que al pinchar con una brocheta ésta salga limpia. Yo lo he tenido un poco más de una hora, aunque Rosa lo tuvo sólo 45 minutos, el tiempo depende del horno, así que id comprobando. Sacamos del horno y dejamos dentro de la bandeja hasta que se enfríe totalmente. Entonces metemos en el frigorífico y dejamos hasta la hora de tomar. Entonces desmoldaremos con cuidado (yo le paso un cuchillo mojado por los extremos para despegarlo, y si después, boca abajo, no sale bien, paso un vaso con agua muy caliente varias veces por el molde para que, con el calor se despegue). Decoramos con un poco de nata montada (crema de leche) y con unos frutos rojos, en mi caso grosellas.
Este tipo de postres son muy fáciles de realizar, rápidos y limpios, por lo que son una muy buena opción para preparar en caso de invitados en casa.
Feliz domingo.
Lidia.
Fuente: este post proviene de Atrapada en mi cocina, donde puedes consultar el contenido original.
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