Bon Appetit, una película del año 2010, dirigida por David Pinillos y en cuyo papel protagonista podemos ver a Unax Ugalde, es una coproducción europea, en la línea de otras comedias románticas de corte gastronómico.
Estoy segura de haberla visto hace tiempo, pero a la hora de escoger receta, no he conseguido volver a ver la película. Recordaba unos espaguetis con naranja y caramelos (Cuadernos de Cocina tiene una receta espectacular inspirada en esta película)...
Decidí ponerme en la piel del protagonista. Españolito de a pie, chef de profesión. Recién llegado a Zurich. ¿Y qué se come en Zurich? Pues el plato nacional suizo por excelencia, el rösti.
Se considera parte del desayuno normal de los agricultores en el cantón suizo de Berna, aunque el origen de este plato está, precisamente en el cantón de Zurich. En la actualidad, además de formar parte de este nutritivo desayuno, se sirve como acompañamiento de carnes o pescados.
Existe además un dilema entre la utilización de patatas crudas o ligeramente cocidas. Yo me he decantado por la versión que parece más tradicional, la de utilizar patatas crudas. De este modo, el propio almidón de las patatas, que no se pierde en la cocción, favorece que se forme la torta y se quede unida.
Es muy común añadir queso suizo en esta preparación, lo dejo a vuestra elección añadirlo. Yo, que soy así de rara, no soy muy fan del queso, y ya sabéis: yo cocino, yo mando... jajajaja.
Rösti
Ingredientes
50 g de cebolla.
1 diente de ajo.
sal.
pimienta negra molida.
aceite de oliva.
4 patatas medianas.
Preparación
1. En primer lugar pelamos y lavamos las patatas. Las rallamos en un bol con ayuda de un rallador grueso. Picamos muy finita la cebolla y el ajo. Añadimos la cebolla y el ajo al bol de las patatas.
2. Calentamos en una sartén un chorrito de aceite de oliva. Salpimentamos las patatas y las ponemos sobre el aceite bien caliente.
3. Con ayuda de una cuchara le damos forma de tortilla. Es importante hacer el rösti a fuego lento para que se cocine bien por dentro. A fuego medio-bajo le lleva unos 15 minutos por cada lado. Debe quedar bien jugosita y dorada por fuera.
4. Se le pueden añadir otros ingredientes: bacon, queso Emmental o Gruyère.
Por supuesto, si queréis ver más recetas inspiradas en la película Bon Appetit, no os perdáis el recopilatorio de Elena en Dulces Helens.
Fuente: este post proviene de No Sin Mi Taper, donde puedes consultar el contenido original.
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