Esta receta está entre la rotación normal de recetas que hacemos con Fer para llevar a la oficina para el almuerzo. Es fácil, bien rápida, de las cosas que se contienen en sí mismas y llena de verduras (y por lo tanto, fibra, vitaminas y todas esas cosas buenas para ti).
Hacer un stir fry bueno depende de tres puntos exactamente:
La temperatura del sartén: ¡siempre alta! Si tienes un wok, es el momento de sacarle provecho.
El orden en que agregas los ingredientes: del más duro al más blando. O, lo que es lo mismo, del que tarda más al que tarda menos en cocerse.
El balance de sabores: dulce, salado, ácido, picoso, amargo. Sí, en Asia picoso cuenta como sabor y como factor a balancear en los sabores generales de un plato. Quieres que todos participen y, sobre todo, se equilibren.
Sin más, aquí tienes los ingredientes, las indicaciones y las variaciones para que prepares el mejor stir fry de res y verduras… todas las variaciones que puedas pensar, para que comas tus vegetales, seas saludable y además disfrutes haciéndolo.
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Ingredientes para el stir fry de res y verduras:
Los ingredientes son para dos porciones.
Un zucchini o calabacita (como le digan en tu región)
Media zanahoria
Media cebolla blanca
Un pimentón rojo o amarillo (saben más rico que el verde, más dulces)
Dos cucharadas de mantequilla de maní
Una cucharada de cilantro picado
Una cucharadita de ajo picado
Jugo de 1/2 – 1 limón, según tu gusto
Una cucharada de salsa de pescado (la encuentras ahora en varios supermercados o en tiendas de comida asiática. La más común se llama Squid)
300 – 400 gr de carne de res en cubos
Pimienta
Chile o, si te diste cuenta al final de que no tenías, sriracha
Procedimiento
Pon a calentar un sartén en lo que cortas las verduras. No las quieres muy chicas:
La calabacita, la puedes partir en cuartos a lo largo y luego en trozos de 1 – 2 cm de grueso.
La zanahoria igual, pero ligeramente más delgada.
El pimiento en cuadros.
La cebolla en pluma: partes la cebolla entera por la mitad, cruzándola por donde saldría la raíz, y luego le quitas la parte de la raíz y la cortas en tajadas gruesas que separas.
Pon a dorar la carne (no bajes el fuego). Agrega el ajo y la zanahoria.
Espera a un momento. Revuelve un poco para que no se queme y agrega el pimentón. Espera nuevamente y agrega el calabacín.
Cuando el calabacín comience a tomar color, agrega la mantequilla de maní, la salsa de pescado y la pimienta. No necesitas agregar más sal: la salsa de pescado es suficiente.
Para este punto, ya todo debe estar cocido, pero sin haber perdido del todo la textura (por eso el fuego alto al cocinar). Agrega el limón y el cilantro.
¡Sirve y disfruta! O, si eres del equipo de llevar comida a la oficina, guarda en táperes y espera a que se enfríe.
Las variaciones hacen que la comida sea más divertida
Puedes variar esta receta de varias formas:
Agrega un toque más de textura, con maní o marañones (nuez de la india)
Cambia la salsa de pescado por salsa soya. La mantequilla de maní por salsa hoisin. Agrega raíces chinas. ¡ta da! Te fuiste de Tailandia a China.
Reemplaza las verduras por las que tengas a mano: coliflor, brócoli, maíz, champiñones, ejotes (habichuelas)…
Reemplaza la proteína por la que quieras o tengas a mano. Tofu, pollo, camarones, cerdo, una mezcla de varias.
Agrega jengibre
¿Tú qué le harías? ¿Cómo prepararías tu stir fry para que reflejara tu estilo de cocina personal?
Fuente: este post proviene de Atole y té, donde puedes consultar el contenido original.
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