Tengo que decir que la receta de hoy me ha sorprendido muy gratamente. Me gustan los higos y aunque los disfruto de lo lindo frescos así sin más, suelo aprovechar cada temporada para hacer algún tipo de elaboración con ellos. La mermelada de higos, tan sencilla y tan rica, higos en almíbar, un capricho, una coffee cake de higos con streusel que no podía estar más buena, son algunas de las recetas que podemos encontrar el el blog con los higos como protagonistas. Ahora bien, hay un antes y un después en las recetas con higos después de hacer esta tarta de almendra e higos.
Se trata de una tarta que requiere un esfuerzo mínimo en su elaboración, que el tiempo que nos va a entretener en la cocina es poquísimo, que no requiere una especial atención durante el horneado. Que si optamos por utilizar una masa quebrada o masa brisa industrial, el resultado seguirá siendo de cine y el trabajo prácticamente nulo.
Las bases de esta receta son la crema de almendra que prepararemos con almendra, mantequilla y azúcar, simplemente mezclándolo y unos higos en su punto que combinan a la perfección. El resultado final es una tarta casi con sabor a mazapán con una base crujiente de masa quebrada y un punto dulce de los higos que la hacen perfecta para la ocasión más especial.
Os animo a que os pongáis manos a la obra y luego me contéis qué os parece esta receta. Apuesto por un éxito rotundo.
RACIONES: 8/10
DIFICULTAD: baja
TIEMPO: 20 minutos + horno
TARTA DE ALMENDRA E HIGOS:
125 G. ALMENDRA MOLIDA
100 G. MANTEQUILLA DERRETIDA
80 G. AZÚCAR
MASA QUEBRADA PARA TARTAS ( FROLLA, PATÉ SUCRÉE) O 1 ROLLO PREELABORADO
10-12 HIGOS
1.- En una sartén añadimos la almendra, con el fuego a media temperatura y removiendola sin parar con una cuchara de palo, tostamos la almendra hasta que veamos que adquiere un tono dorado. Apartamos la sartén del fuego y retiramos la almendra para evitar que se siga cocinando con el calor remanente de la sartén.
Aunque este paso es opcional, creo que la almendra tostada potencia su sabor, y queda perfecta para este tipo de tarta. Si hemos comprado almendra entera, la molemos antes de tostarla.
2.- En un bol mezclamos la almendra molida y ligeramente tostada, la mantequilla derretida y el azúcar. Con la ayuda de un tenedor integramos los ingredientes hasta conseguir una pasta espesa y densa. Reservamos.
3.- Extendemos la masa quebrada sobre un molde que previamente habremos cubierto con papel vegetal. Le damos la forma del molde y dejamos que sobresalga de los borde del molde para luego poder doblar la masa. Extendemos la pasta de almendra en la base de la tarta.
4.- Cortamos los higos de cuatro partes y los colocamos siguiendo el diseño que más nos guste, directamente sobre la pasta de almendra.
5.- Doblamos el exceso de masa sobre los higos y pintamos esa masa que queda a la vista con una pizca de mantequilla derretida y espolvoreamos azúcar sobre ella.
6.- Con el horno previamente caliente a 180ºC, con calor por arriba y por abajo y sin la opción de ventilador, horneamos la tarta durante 35 minutos. Dependiendo del tipo de masa que empleemos, si es comprada o elaborada en casa, el tiempo de horneado puede variar. La idea es conseguir que la masa quede doradita. En ese momento la tarta estará lista. Retiramos la tarta del horno y dejamos que se enfríe sobre una rejilla antes de desmoldarla y disfrutarla.
Fuente: este post proviene de Galletas para Matilde, donde puedes consultar el contenido original.
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