Aix! Qué ilusión me hacía preparar esta tarta. Es la preferida de mi chico y hacía tiempo que me rondaba por la cabeza hacer la versión casera. El fin de semana pasado me decidí y sin que lo supiera compré todos los ingredientes y me puse manos a la obra mientras el estaba aún en el trabajo. La idea era sorprenderlo con este rico postre después de cenar. Pero hubo un error de cálculo y llegó antes de tiempo con lo que me pilló en plena elaboración. La sorpresa se la llevó igual y tuve que estar frenándolo para que no cogiera un pedazo antes de que estuviera terminada.
Después de comerla, le pedí que me puntuara y ¿sabéis qué? ¡Me puso un 9! Supongo que tanto como un excelente no... (es lo que tiene el amor) pero sí que puedo decir que estaba muy muy buena y para ser mi primera vez quedé muy satisfecha con los resultados.
INGREDIENTES
- 1 placa de hojaldre
- 1 huevo batido
- 300g de fresas
Para la crema pastelera:
- 500ml de leche entera
- 4 yemas de huevo
- 1 vaina de vainilla
- 6 ó 7 cucharadas de azúcar
- La cáscara de medio limón
- 2 cucharadas de maicena
Para el brillo:
- 1 sobre de gelatina neutra en polvo
- 1 vaso de agua
- 2 cucharadas de azúcar
PREPARACIÓN
¿Manos limpias? ¡Empezamos!
1. En primer lugar, retiramos la masa de hojaldre de su envoltorio, la estiramos y doblamos los laterales haciendo un pequeño borde.
2. Pintamos con huevo batido el borde de la masa y pinchamos con un tenedor la parte central, porque no queremos que suba. La introducimos en el horno precalentado a 180º durante unos 20 minutos, hasta que veamos que está doradita.
3. Mientras se hace el hojaldre. Hacemos la crema pastelera. Podéis ver la receta pinchando en el nombre.
4. Una vez lista, retiramos la masa de hojaldre del horno y la dejamos enfriar a temperatura ambiente.
5. Cuando la crema pastelera esté fría, la utilizamos para cubrir la tarta respetando los bordes.
6. Lavamos las fresas, les retiramos las hojas superiores y las cortamos en finas láminas. Las vamos colocando encima de la crema, intentando que quede visualmente atractivo.
7. Preparamos el brillo para tartas (podéis ver la receta haciendo clic en el nombre) y lo extendemos sobre la capa de fresas con una brocha de cocina o una cucharada.
8. Dejamos la tarta reposando en la nevera. ¡Maravillosa!
Fuente: este post proviene de Cookingdiana, donde puedes consultar el contenido original.
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