Por aquel entonces, no podía imaginar lo que iba a disfrutar y las alegrías que iba a recibir de personas que no conozco personalmente, pero a las que he cogido cariño y a las que considero amigas.......parece raro, pero pienso que eso es la magia de ser blogger.
Os quiero dar las gracias por estar al otro lado, por estar siempre ahí, por vuestras visitas dejéis comentarios o no, pero sobre todo por vuestra amistad!!
Solo de saber que alguna de mis recetas puede haberos sido útil es una maravillosa sensación!!
La idea de hacer esta tarta de queso la tuve cuando para el reto Tus recetas, salieron elegidos el queso crema y el atún en conserva.
Como ya tenía la idea de hacer una tarta, me vino genial hacerla con el queso crema porque las tartas de queso nos encantan en casa; y como quería hacerla diferente de las que suelo hacer, he seguido la receta de Cristina de Un pedacito de cielo, aunque he cambiado alguna pequeña cosa.
Tengo ya varias tartas de queso publicadas, todas diferentes y a cual más buena!!
El queso crema es un tipo de queso untable que se obtiene al cuajar mediante fermentos lácticos una mezcla de leche y nata (crema de leche). Este tipo de queso se consume normalmente acompañado de pan, siendo común el uso del mismo en tostadas.
Se trata de una crema blanca, distribuida en envases similares a los de margarina o mantequilla. Se consume en desayunos y postres, y una variedad de Estados Unidos es el ingrediente principal de algunos pasteles de queso. (Wikipedia)
Para la base de galletas:
100 gramos de galletas tipo Digestive.
45 gramos de mantequilla.
Para el relleno:
350gr. de queso crema tipo Philadelphia.
300gr. de queso mascarpone.
150gr. de chocolate blanco.
75gr. de azúcar.
2 huevos enteros y 2 yemas.
1 cucharadita de esencia de vainilla.
1 cucharada de harina.
Para la cobertura:
150g. de chocolate blanco.
50g. de nata (crema de leche) para postres.
Fresas y frambuesas para adornar.
Modo de hacerlo:
La base de galletas:
Primero de todo prepara el molde que vayas a utilizar.
Pon un papel de horno en la base del molde para que te sea más fácil desmoldarlo.
Precalienta el horno a 170º.
Tritura las galletas y funde la mantequilla.
Mezcla la mantequilla fundida con las galletas hasta que esté todo bien unido.
Pon toda la mezcla de galletas en la base del molde, aprieta bien con una espátula para que esté todo liso.
Hornea durante unos 10 minutos.
Saca del horno y deja que se enfríe mientras preparas el relleno.
Vamos con el relleno:
Precalienta el horno a 180º.
Funde el chocolate blanco en el microondas, poco a poco y reserva.
Pon los quesos en el bol de la batidora junto al azúcar y bate a baja velocidad hasta que estén bien mezclados.
Añade los huevos de uno en uno y sigue mezclando, añade también las yemas.
Echa ahora la esencia de vainilla y la cucharada de harina, sigue mezclando hasta que esté todo bien unido.
Añade el chocolate blanco fundido que tenías reservado y mezcla con una espátula.
Echa toda la mezcla en el molde y alisa la superficie.
Hornea unos 50 o 60 minutos a 180º, o hasta que compruebes que está hecho. La manera de comprobar que está cuajado es mover un poco el molde y ver si el centro tiembla, si ves que ya está apaga el horno y déjalo dentro con la puerta entreabierta unas dos horas más.
Vamos con la cobertura de chocolate blanco:
Pon a hervir la nata (crema de leche) en un cazo.
Cuando haya cogido el punto de ebullición, apaga el fuego y echa dentro el chocolate troceado, mezcla con una espátula hasta que esté completamente fundido.
Deja que repose unos minutos y coja consistencia.
Después de unos minutos de reposo, echa por encima de la tarta la crema de chocolate.
Decora con las fresas y frambuesas.
Déjalo en la nevera unas 5 o 6 horas más, aunque es mejor de un día para otro.
Espero que te guste.
Si quieres ver las recetas con queso crema o con atún, de mis compañeras de reto, pincha en la foto del logo!!
Fuente: este post proviene de Mandarinas y Miel, donde puedes consultar el contenido original.
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