Debo confesaros que resulta deliciosa, y que si os decidís a probarla ya no querréis más la versión repleta de azúcar porque no es necesario tomarla así y con este tipo de recetas que yo os traigo, podemos disfrutar de un capricho dulce y sin estar pensando que nos hace daño a nuestro organismo o que nos engorda a cada bocado.
Además os contaré que después de mucho investigar recetas para mi super cheescake, he realizado una especie de remix de todo lo que he visto, (muy típico en mi), pues ninguna de las recetas que veía por Internet me convencīan del todo y porque según mi opinión la receta de tarta de queso fit que yo he realizado cumple todos los requisitos exigibles… a saber:
Es una versión sana: No lleva azúcares añadidos
Es una versión sencilla: No hace falta ni encender el horno (lo que ahorra tiempo y dinero)
Es una versión asequible: Todos los ingredientes son fáciles de encontrar y también baratos
Os cuento como hacerla!!!
Ingredientes para la base:
1/3 taza de harina de almendras
1/4 taza de harina de coco + 2 cucharadas para terminar la masa
7 dátiles hidratados y deshuesados
1 pizca de sal marina
1 cucharadita pequeña de agua
Ingredientes para el relleno
2 cucharadas soperas de queso batido
1 cucharada de queso de untar light
1/2 vaso de leche de almendras
1 sobre de gelatina neutra
8 gotas de estevia pura (99%) – de herbolisteria
Ingredientes para la mermelada
1 taza de frutos rojos (fresas, arándanos y moras)
7 gotas de estevia pura (99%) – de herbolisteria
1 sobre de gelatina neutra
PROCEDIMIENTO
En primer lugar se realiza la base procesando en la batidora todos los ingredientes que os he detallado para la base de la tarta ( menos las dos cucharadas de harina de coco). Una vez procesados en la batidora o procesador a que tengáis, se pasan a un bol donde se añaden las dos ultimas cucharadas de coco rallado que tenía reservadas y se termina de hacer una masa manejable con la punta de nuestros dedos.
Se coloca en un molde y se mete en el congelador. Yo he usado un molde – aro de acero
A continuación vamos a preparar el relleno.
Se deja la gelatina neutra hidratando en un bol con agua fría (1/4 taza de agua).
Mientras, en un cazo a fuego medio (sin llegar a hervir) se calientan el resto de ingredientes detallados para el relleno.
Cuando comienza a hunear se añade la gelatina ya hidratada y se mezcla bien.
Una vez se han mezclado bien todos los ingredientes vertemos la masa en nuestro molde que teníamos en el congelador esperando y que ya debe de tener la base con una buena consistencia. Se mete en el congelador de nuevo mi entrar preparamos el topping o mermelada
Mermelada fit!
Solo he troceado levemente las fresas porque eran grandes. Las he calentado junto a la estevia y cuando ya humeaban he añadido un sobre de gelatina neutra que había hidratado previamente con 1/4 taza de agua. Una vez bien mezclado, añado de nuevo al molde que tenía en el congelador (antes de añadir hay que ceriorarse de que el queso ha cuajado y tiene una buena consistencia. Es imprescindible para que quede bien)
Meter en el frigorífico y esperar unas horas antes de servir.
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nota: es una tarta para unas dos personas, pequeñita… si la queréis más grande duplicar cantidades y usar varios moldes para su presentación porque así en su versión pequeña quedan super cuquis
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