Los que me siguen por RRSS vieron que mi hija Marta cumplió ayer 29 años, dice que no le gusta ese numero (quien los pillara), pero lo que si le gustan son los donuts y sobre todo los Dunkin, ya se encargo de hacernos saber que habían abierto un Dunkincoffee en Palma y allí que nos fuimos su padre y yo (promoción gratuita :) el único interés es que le gustan a nuestra hija.
Y justo hace unos días vi la tarta donuts que Megasilvita tiene publicada en su blog, la diferencia es bastante obvia, yo la hice en un molde de 18 cm. por eso es mas baja y los Dunkin que la cubren son muy contundentes, con extras de todooo, que pesan... justo hice la foto y a comer Dunkins se ha dicho! porque la tarta estaba procediendo a su hundimiento por aplastamiento; Eso si, mas fácil imposible y sin horno. Lo único es que hay que hacerla el día anterior para que su consistencia sea correcta.
Ingredientes:
3 donuts + 2 donuts para la base
125 ml. de leche
75 gr. de panela
200 gr. de mascarpone
125 gr. de queso Quark
1 sobre cuajada
Donuts, donettes o Dunkins en mi caso para decorar.
Elaboración:
Triturar bien los dos donuts de la base y en un molde desmoldable (mejor de 15 cm. el mio fue de 18 cm.) presionar las migas y repartir por la base.
En una olla ponemos la leche, el azúcar, mascarpone, el queso quark y los otros 3 donuts triturados. Calentar a fuego suave hasta que todos los ingredientes estén bien integrados. Podemos batir la crema para eliminar los posibles grumos.
Añadir el sobre de cuajada y remover sin parar a fuego bajo hasta que tenga un poco de cuerpo; verter la crema sobre el molde y dejar enfriar a temperatura ambiente. Reposar en la nevera un mínimo de 24 h.
Una vez fría, desmoldar y servir.Yo no la congelé pero Megasilvita recomienda congelarla 1h. antes de servir para evitar tener problemas al desmoldarla.
Como anécdota os tengo que contar que conocí a Silvia {Megasilvita} en el sótano de mi casa, si, si como leéis, alrededor de hace 10 años Silvia se desplazó a Mallorca y nos impartió un curso particular de tartas fondant a un grupo de chicas que queríamos aprender de la mano de la mejor, me atrevería a decir de las primeras en España, con una simpatía y gracia como ninguna. Ella fue mi mentora en este tipo de tartas tan vistosas y personalizadas que estaban empezando a entrar en nuestro País.
Solo me queda deciros que como ya habéis comprobado esta tarta está de muerte, 29 años solo se cumplen una vez, hay que soplar las velas y pedir un deseo como apetezca; ahora tod@s estamos volviendo un poco a modo #healthy; sin abusar, siendo conscientes cada uno y si después nos hacemos una caminata nos vendría genial, mientras viviremos el momento, celebraremos la vida y en este caso los 29 años de mi hija.
FELICIDADES! el año que viene cambio de número!!!
Fuente: este post proviene de Mamala, donde puedes consultar el contenido original.
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