Se acerca el verano y poco a poco se nos van quitando las ganas de encender el horno pero yo aún resisto. Esta semana traigo una receta inspirada en pastelitos más tradicionales, donde he querido conservar el estilo de los pastelitos de los años 50 en América donde se rellenaban con frutas naturales y alguna crema dulce. En este caso se trata de unos preciosos whoopie pies rellenos de crema de queso y fresas frescas. Soy consciente de que la temporada de fresas está tocando a su fin, pero aún quedan algunas por ahí que nos pueden servir perfectamente para las últimas recetas de esta primavera. ¡Vamos con ella!
Para la elaboración de estos whoopies tenemos dos posibilidades, usar un molde específico de whoopies, o dibujar círculos en un papel de horno usando como modelo el culo de un vaso de 250 ml. No os preocupéis por la masa porque es bastante espesa y no se va a esparcir cuando la echéis en los círculos, aunque al hornear sí que se extenderían un poco así que recordad dejar 1 cm de separación entre ellos.
Ingredientes
Para las esponjas
375g de harina
2 cucharaditas de levadura
1 cucharadita de bicarbonato sódico
½ cucharadita de sal
180 gr de mantequilla sin sal a temperatura ambiente
250 gr de azúcar
2 huevos
1 cucharadita de esencia de vainilla
120 ml de leche
Para el relleno
10 fresas
300 gr de queso crema
300 gr de mantequilla sin sal a temperatura ambiente
600 gr de azúcar glas
Elaboración
Mezclamos y tamizamos en un bol el bicarbonato con la sal, la harina y la levadura. Por otro lado, ponemos a batir la mantequilla con el azúcar. Cuando tengamos esto hecho, agregamos los huevos a la mezcla de mantequilla y lo integramos bien.
Ahora nos toca añadir los ingredientes secos a la mezcla de mantequilla, para ello, agregamos la mitad de la mezcla tamizada mientras seguimos batiendo, después agregamos la leche y la esencia de vainilla y finalmente agregamos el resto de la mezcla de ingredientes secos. ¡Y ya tenemos nuestra masa preparada! Yo, además, separé la mezcla en dos partes iguales y teñí de rojo una de las mitades para hacer las esponjas de dos colores diferentes pero esto ya va en gustos.
Para hornear, precalentamos el horno a 170 grados y vamos rellenando nuestros círculos o moldes con dos cucharadas de masa por esponja. Hornearemos durante 20 minutos o hasta que al pinchar las esponjas con un palillo, salga limpio.
¡¿Veis que sencillo?! Preparar estos whoopies no os va a dar apenas trabajo y son estupendos. Ahora sólo nos queda dejarlos enfriar cinco minutos en el molde y pasarlos después a una rejilla para que enfríen completamente.
Mientras dejamos los whoopies enfriar, podemos ir preparando el relleno. Es tan sencillo como mezclar la mantequilla con el queso crema y el azúcar glas en nuestra batidora durante 10 minutos y después refrigerarlo 10 minutos más.
Ahora que tenemos todo preparado, ponemos una capa de crema en la base de una de las esponjas, encima ponemos unos trocitos de fresa y otra fina capa de crema. Finalmente ponemos encima otra de las esponjas de los whoopies para terminar de cerrarlo.
¡Y ya está! Eso sí, si hace mucho calor, os aconsejo refrigerarlos hasta la hora de servir (mínimo 10 minutos) ya que la crema de queso es muy delicada y enseguida se pone blanda. Por último, les podéis tamizar un poco de azúcar glas por encima para decorar.
¡Espero que os gusten!
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