¿Qué necesitas? aceite y cáscaras. Así de fácil, como lo oyes.
Ponemos en recipiente hondo un buen chorro de aceite, e introducimos las cáscaras y cabezas.
Lo ponemos al fuego lentamente, lo más lentamente que podamos hasta que vaya cogiendo un color tostado. Cuando coja el color deseado, le vamos a incorporar más aceite, la proporción dependerá de la cantidad de cáscaras que tengas, y lo vamos a mantener a fuego lento confitándolo.
Cuando haya transcurrido 3/4 de hora, retiramos y lo colamos en un chino, colador fino… Aprieta con un utensilio para sacar todo el jugo.
Dejamos posar bastante tiempo para separar los jugos del aceite. Y el resultados te sorprenderá .
Sin más me despido, espero que lo pongáis en práctica pues es fácil, es rápido y es económico, vamos chupadooo ¡¡
Un besazo chic@s
Me encantará que me contéis vuestra experiencia.