Como estoy hasta los pelos de retos, últimamente me inclino por las recetas fáciles y rápidas. Aunque con esta tenía mis dudas. El boniato es dulce y el jamón salado, así que no estaba segura del sabor, pero la verdad es que me ha encantado.
Como soy la reina de la malasuerte, en cada asalto me encuentro que uno de los ingredientes no lo encuentro. Es el caso del pan cracker Santa Rita. Así que eché mano de lo que tenía en casa, en este caso del Panko, pero mejor lo hacéis como Ana, que no es lo mismo. Podéis ver la receta original aquí.
Las cantidades que ha puesto ella son para dos. Si tienes que darle de comer a un escuadrón lo tienes crudo. Así que os pongo el doble y así tenemos para cuatro. Es la única variante, bueno y unas chips de boniato que he hecho para decorar y para comerme. Y la temperatura de cocción de los boniatos.
520 ml. de caldo de jamón
520 grs. de boniato asado
180 grs. de jamón en tacos pequeños
4 cucharadas de pan cracker Santa Rita
Pimienta negra recién molida
Sal
Aceite de oliva virgen extra
La cantidad de boniato es una vez cocido y pelado, para que podáis calcular más o menos vienen a ser tres boniatos hermosos.
Cocemos los boniatos en el horno a 180º con el horno precalentado una hora aproximadamente. Pincháis para saber si están hechos.
Los pelamos y pesamos la cantidad indicada en los ingredientes. Los mezclamos con el caldo de jamón y añadimos la pimienta. Batimos con una batidora y le añadimos un poco de aceite para emulsionar, más o menos una chucharadita. Os quedará una crema espesita, si la queréis más clara le añadís un poco más de caldo de jamón. Rectificamos de sal.
Calentamos la crema y reservamos caliente.
En una sartén con un poquito de aceite, doramos los tacos de jamón. Cuando estén dorados incorporamos el pan cracker y lo tostamos. Retiramos del fuego y reservamos.
Ana lo sirve en vasitos con el crumble por encima, yo como tengo empacho de vasitos he cambiado el recipiente.
Las chips de boniato no tienen mayor secreto que pelar el boniato, cortarlo con una mandolina y freírlo en abundante aceite sin poner mucha cantidad a la vez y luego escurrir sobre papel de cocina para que suelten el exceso de aceite y salar una vez fritas.
Como siempre os recomiendo que visitéis su blog, siempre es interesante conocer blogs nuevos y nuevas formas de interpretar la cocina.
Nos vemos mañana con el Reto Tía Alía. Un beso.
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