Las lentejas son uno de los platos de cuchara preferidos en casa. Tanto si preparo lentejas con compango o lentejas viudas (así las llamaba mi madre cuando las hacía solo con verduras) son siempre bienvenidas. A veces las hago con patatas, otras con arroz; en la versión vegetariana acostumbro a incluir amaranto.
¿Qué es el compango? Es la carne que se pone en la fabada asturiana. Suele ser chorizo, morcilla, tocino y lacón. Es bastante típico de las cocinas cántabra, asturiana y gallega.
¿Por qué con compango? Porque el sabor ahumado que deja en el guiso es excepcional. Por supuesto que puedes utilizar chorizo, morcilla y tocino entreverado sin ahumar si no te gustan los sabores intensos.
¿Qué tipo de lentejas usas? Hay tal variedad que cuesta elegir. La lenteja pardina o las Dupuy son ideales. Ahora estoy utilizando unas verdes que me dan muy buen resultado, son muy suaves y no se deshacen.
¿Cómo hacerlas, con olla rápida o de forma tradicional? Hace unos meses te hubiera contestado, sin dudarlo, de forma tradicional. Poner los ingredientes en una olla de barro y dejar que se hagan a fuego bajo, que el guiso vaya cogiendo cuerpo con el chup chup de la lumbre.
El verano pasado me compré una olla a presión, ahora las llaman ollas rápidas. Desde que me casé, esta es la tercera que he tenido. Pero en realidad es la primera que uso de forma regular. Siempre me han dado terror, y acababan en el fondo del armario o regaladas a alguna amiga.
Aprovechando las rebajas me hice con una olla rápida pequeña, de 3 litros, y empecé a cocinar con ella. Y lo primero que preparé fueron unas lentejas con compango. Me salieron estupendas. Fue un buen estreno que me animó a seguir probando.
La receta que te traigo hoy está preparada, como no, con olla rápida. Pero con una cazuela de barro o una de acero inoxidable te va a quedar de fábula igual.
Ingredientes
Para cuatro personas
280 g de lentejas
1 cebolla
2 patatas
1 tomate maduro
3 dientes de ajo pelados
1 zanahoria
Compango
1 hoja de laurel
2 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
1 cucharadita de pimentón dulce
Agua
Sal
Preparación
1.- Con la ayuda de un colador, lavamos las lentejas.
2.- Lavamos las verduras. Pelamos y troceamos la zanahoria, la cebolla y chascamos (*) las patatas.
3.- Pincha con un tenedor el chorizo y la morcilla.
4.- En la olla rápida pon todos los ingredientes y cúbrelos de agua hasta que esté unos cuatro dedos por encima de ellos.
5.- Sin tapar la olla, ponla a fuego vivo. En cuanto comience a hervir, cierra la olla y selecciona el nivel de presión adecuado. La mía tiene dos, presión alta o presión baja, pero eso depende del modelo y de la marca.
6.- Mantén el nivel de fuego al máximo hasta que la válvula de funcionamiento empiece a soltar vapor. Es el indicativo de que empieza la cocción. Reduce el fuego al mínimo y mantén la cocción el tiempo que el fabricante de tu olla indique. Yo las mantengo 25 minutos y las retiro del fuego.
7.- Ya solo queda esperar a que baje la presión para poder disfrutar de un plato de cuchara rico, rico.
Trucos/Consejos
(*) ¿Qué es chascar las patatas y cómo lo hago? Pues es un modo de cortarlas que nos permite aprovechar el almidón de la patata para espesar el caldo. Cuando partas la patata en trozos no llegues hasta el final con el cuchillo, separa el trozo estirando. Sentirás un chasquido cuando se rompa, de ahí el nombre.
Ten en cuenta que cada olla es diferente, por lo que consumirá una cantidad de agua distinta. Es importante que conozcas tu olla rápida para no tener sorpresas.
El tiempo de cocción variará también con el tipo de legumbre. Las pardinas necesitan menos tiempo que las castellanas. También influye si las tienes en remojo previo o no.
Si haces más cantidad de la que necesitas, piensa que se pueden congelar. Eso sí, no congeles las patatas porque una vez descongeladas quedan acuosas y con una textura poco agradable.
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