Os debía ya hace un par de semanas una receta, así que, aquí la tenéis algo más potente que las anteriores, pero es que tenemos la Navidad encima. Esta vez se trata de un pastel de frutos rojos ¡Una bomba! para el cuerpo y los ojos, pero siguiendo un estilo de vida saludable, no pasa nada por hacer un día una bonita excepción. Vamos con ella.
La idea es sobretodo que disfrutéis preparando una merienda o desayuno especial.
Dedicar un poco de tiempo a poner una mesa bonita, encender unas velas y dejar que la magia haga lo demás. Al final la vida se pasa volando, y solo quedan esos ratitos junto a las personas que uno quiere a su lado.
En mi casa este año la batuta la llevarán los niños (los únicos que no pierden la ilusión). Y menos mal porque se presentan unas fiestas un poco difíciles. Pero bueno, la vida sigue.
Venga, me dejo de romances, voy a contarte cómo se prepara este exuberante pastel.
Receta de pastel frutos rojos
Ingredientes:
Hoy no os voy a poner lista de ingredientes porque tengo un buen motivo. La base de este pastel puede ser la de cualquier otro bizcocho que os guste. Tanto un bizcocho de almendra, como otro de mantequilla, o el de chocolate. En el recetario tenéis una buena colección así que, elegir el que más os guste.
Lo básico es hacer un buen bizcocho y dejarlo enfriar sobre una rejilla. Sólo cuando esté frío lo podrás cortar sin problema con un cuchillo en buenas condiciones.
Para el relleno misma operación. En este caso he usado nata montada (crema de leche) (os dejo aquí la receta para que veáis como se monta), pero en su lugar se pueden usar muchas otras cosas, como mermelada de frutos rojos o incluso crema de cacao.
Y para la decoración pues un remate con todos los frutos rojos que encontréis.
Frambuesas y grosellas en mi caso, pero sirven moras silvestres, fresas, cerezas... Si el pastel es de frutos rojos, pues ya sabéis que tengan este color, aunque tampoco pasaría nada por mezclarlos. Al final es un desayuno completo con un buen festín de fruta fresca.
Sólo falta sacar tu mejor vajilla, y disfrutar un poco poniendo una mesa bonita.
En este caso he usado algunas piezas de Villeroy&Boch con quien llevo mucho tiempo colaborando en su blog 1748.
Para los coleccionistas os diré que se trata de la colección de desayuno Toys Delight, las copas de cava Boston y los vasos Artesano Hot Beverages.
¿Qué os parece el desayuno? ¿Completo verdad? Nada luego nos damos un paseo largo a buen ritmo y arreglado.
Fuente: este post proviene de este blog, donde puedes consultar el contenido original.
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