50 a 60 grs. de sal, disuelta en 1 litro de agua
1/3 taza de vinagre
1 ó 2 cucharaditas de ají molido
2 a 3 dientes de ajo
2 hojas de laurel
1 cucharadita de hojas o semillas de eneldo (opcional)
Lavar bien los pepinos y cortar las puntas de los dos lados.
Colocar en un recipiente alto de vidrio de unos 2 lts. de capacidad.
Agregar la salmuera, procurando que los pepinos queden bien cubiertos por ella. Agregar luego el ajo, el ají molido, las hojas de laurel y el eneldo. Mezclar un poco y agregamos el vinagre.
Para que los pepinos no suban a la superficie (deben mantenerse todo el tiempo debajo del nivel del líquido ) colocar encima de ellos y dentro del frasco un recipiente chico de vidrio de modo que su fondo toque la parte superior de los pepinos, empujándolos hacia el interior del líquido. De ser necesario, se puede agregar agua en este recipiente para que pese mas y no sea empujado hacia arriba por los pepinos.
Dejar los pepinos así por 2 ó 3 días. Para que no aparezcan fermentaciones no deseadas (opacidad del líquido) se puede ir agregando un poco mas de vinagre.
Cuando los pepinos se comiencen a amarillear, pasar el recipiente a la heladera y dejar que continúe la fermentación por varios días más hasta que están a punto con el sabor correcto. En tiempo caluroso, el proceso es más rápido.