Parece casi obligado el hacer este tipo de platos en estas fechas, aunque tengo que decir que quitando en pleno verano, es uno de los platos que mas gustan en casa, y que lo comemos de manera habitual, porque nos encanta.
También llamado Potaje de Vigilia, ya que en la Semana Santa es un plato tradicional donde los haya, imprescindible en Viernes Santo,en muchas casas.
Yo prefiero tratarlo como lo que es, un plato sencillo y plato único, al integrar legumbre, verduras y pescado, y que por muy de "vigilia" que sea, te quedas como un "marques" después de meterte entre pecho y espalda un buen plato de este rico y contundente potaje.
Añadimos las espinacas y el bacalao escurrido, y le damos una vuelta.
En una sartén ponemos como un par de cucharadas de aceite, cuando este caliente añadimos la harina, removemos hasta que se tueste, y fuera del fuego, añadimos la cucharada de pimentón, mezclamos con la harina, (esto es para que el pimentón no se pueda quemar) y lo añadimos al potaje, removemos un poco, siempre con cuchara de madera para que no rompa la legumbre, y espese el guiso.Añadimos los huevos duros picados.
Servir y disfrutar.
Seria una verdadera lastima, tener que esperar a la Cuaresma, para poder hacer este riquisimo plato!!!Había invitado a comer a una amiga, y con un picoteo delante, comimos como "Generales"...!!!
Tampoco me he complicado la vida, he usado garbanzos de bote, 1 pastilla de caldo, unas migas de bacalao, y unas espinacas ya limpias, con lo cual ya sido un plato muy rápido y fácil de hacer..!!