Con un consumo de cerveza en verano moderado obtenemos para nuestro organismo muchos beneficios nutricionales. La cerveza está compuesta en un 92% de agua, y el resto son ingredientes como la cebada y el lúpulo, que aportan potasio, fósforo, vitaminas y antioxidantes. Desde el CICS, incluso, declaran las ventajas de la ingesta de las variedades sin alcohol para colectivos como las mujeres embarazadas.
Desde la SEDCA (la Sociedad Española de Dietética y Ciencias de la Alimentación), el profesor Jesśus Román Martínez, hace hincapié en el valor hidratante y nutritivo de la cerveza con estas declaraciones: “el consumo de cerveza moderado de cerveza en verano, entendida como 2 ó 3 cañas diarias para los hombres, y 1 ó 2 para las mujeres, combinado con un alto consumo de frutas y verduras, podría ser un complemento al agua para calmar la sed y mantenernos hidratados este verano”.
Pero la cerveza, además de este carácter alimenticio, es un elemento claramente asociado al ocio. ¿Quién no piensa en una tarde de playa o piscina con su vaso de cerveza fresca mientras se pasa el tiempo entre amigos? Para los que quieran disfrutar de esos momentos, se acaba de lanzar al mercado un dispensador diseñado en España, Amarilla Glacial, para servir la cerveza a la temperatura perfecta, además de que mantiene su calidad y sabor en condiciones óptimas. Su capacidad es de 3 litros, no necesita fuente de energía, y se puede trasladar fácilmente gracias al asa que lleva incorporado.
E, incluso, además de refrescarnos, hidratarnos y hacernos pasar buenos momentos, la cerveza puede ser un ingrediente más en las recetas de cocina. Compruébalo preparando este sensacional pollo a la cerveza.
Y a ti, ¿cuánto te gusta la cerveza?