Hoy hemos tenido que desayunar en condiciones para hacer frente a uno de los primeros días de calor y humedad, de los que por aquí hay poco en verano.
Os voy a lanzar una pregunta ¿qué desayunáis por las mañanas? Sé que muchos de vosotros me vais a contestar desde un nada o un café hasta un desayuno completo, pues os diré que mal, mal, aunque estoy segura que ya lo sabéis.
Las prisas en la vida diaria son malas compañeras, sobre todo si hacen que no llevemos una correcta alimentación. No pretendo que preparéis una mesa como la que he creado para la imágenes del post, tampoco que tengáis que levantaros 20 minutos antes para desayunar así, a pesar de que tengo claro que muchas de vosotras sí lo hacéis para salir perfectas de casa, pelo bien peinado, maquillaje perfecto y con un café rápido porque no da tiempo para más.
Este tipo de mesas las podéis dejar para el fin de semana y de lunes a viernes dedicaros diez minutos en un rincón de la cocina para poder empezar el día en con el desayuno adecuado.
El desayuno va a ser nuestro combustible para el resto del día gracias a la ingesta de glucosa. Esta nos aporta la energía suficiente para llevar a cabo de forma correcta nuestras tareas diarias.
¿Qué pasa si no desayunamos de forma correcta?
Esa falta de glucosa para nuestro cuerpo se transforma en decaimiento, mal humor y falta de concentración. En edad escolar esto se transforma en una falta de rendimiento bastante acusada.
La falta de desayuno está también directamente relacionada con el sobrepeso, el ayuno nos incita a comer más durante el resto del día.
¿Qué desayuno?
Nuestro desayuno ha de contenergrasa, fibra, vitaminas y minerales.
Esto transformado en alimento se convierte en:
Cereales, gracias a los hidratos de carbono nos dan energía. Puedes tomarlos en forma de cereales propiamente dichos, bizcochos caseros o pan integral (fibra)
Lácteos, fuente de proteínas, calcio y vitaminas A y D. Aquí no voy a entrar en el debate sobre si se debe tomar leche de vaca (lactosa) o sustituirla por otro tipo lácteo.
Frutas, nos dan hidratos de carbono, agua, minerales y fibra.
La fruta, la puedes tomar en forma de zumo, si no te da tiempo de hacer uno natural evita los zumos a base de concentrado, hay algunos en el mercado que son 100% fruta.
Los cereales y lácteos, éstos puedes combinarlos. Un vaso de leche con cereales, yogur con cereales, unas buenas tostadas como las nuestras, a base de queso de untar (lácteos) y fruta.
FOTOGRAFIA TCV
Fuente: este post proviene de Tu Cajón Vintage, donde puedes consultar el contenido original.
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