-DESPUÉS DE UNA DURA SUBIDA, SUELE HABER UNA FACIL BAJADA. ESTO SUELE OCURRIRLE A LA MAYORIA DE PERSONAS. DURANTE SU VIDA, QUIZÁS HAN PASADO POR MOMENTOS MUY DIFICILES, SEAN DE SALUD, ECONÓMICOS O SENTIMENTALES PERO NORMALMENTE, ESTAS COSAS SUELEN SOLUCIONARSE Y AUNQUE A VECES NO DEL TODO, SI QUE PUEDEN MEJORAR NOTABLEMENTE - Así se lo digo al tercer cocinero Joaquín mientras estamos desayunando en la cafetería que hay justo detrás de la primera calle que da al restaurante donde estamos los dos, el, como repostero y yo, como encargado de la gran cocina donde trabajamos más de trece personas sin contar con el personal eventual cuando el trabajo lo requiere. Todavía falta media hora para incorporarnos al trabajo y como estamos relativamente cerca, no me preocupa seguir con la conversación que empezó Joaquín cuando me contó que no había podido comprar el piso de sus sueños puesto que meses atrás, habían despedido a su mujer del trabajo y el, hacía tan solo pocos días que había conseguido el empleo conmigo. Tuvo que dejar durante unos meses su trabajo por una larga enfermedad y claro, no habían tenido los ingresos suficientes hasta hoy que ya empiezan ambos a remontarse económicamente con la incorporación de su esposa en la lavandería industrial, propiedad también, del dueño del restaurante.
- TANTO MI ESPOSA MAGDA COMO YO MISMO, ESTAMOS MAS QUE AGRADECIDOS POR TUS PALABRAS Y POR HABER HECHO TANTO POR NOSOTROS AL HABLAR CON EL SR. RAMÓN-
Le digo que no tiene ninguna importancia y cuando doy mi primer sorbo al café con leche, mi paladar me da el toque de aviso al detectar la leche completamente agria al igual que le pasa a Magda sentada frente a mí, como así, a Joaquín con su cortado, y ahora pienso. Esto puede pasar, claro que si, y a veces no hay que echarle la culpa al que nos sirve, pero hay que cerciorarse bien, antes de darlo al cliente, al igual que unos canelones agrios que mi acompañante intentó comer en un restaurante el mes pasado. Los que trabajamos en hostelería podemos "medio" entender estos fallos, pero los clientes ajenos a este mundo, quizás nunca lleguen a perdonarlos. Trabajemos siempre bien, con seguridad alimentaria, con buenos propósitos y probar las cosas antes de darlas por buenas.
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