Estoy ansioso por llegar, ya que ayer fué un dia muy agotador y hoy, espero que será un dia relajante. Subo las escaleras con paso lento ya que los escalones son bastante altos y al llegar a la planta superior, la preciosa cocinera Corbeau de origen francés abre la puerta de su piso con decisión, ya que me ha invitado a cenar en su propia casa, además de ser compañeros de trabajo también somos muy buenos amigos. Pronto, veo en la pared de la derecha pintada de un azul cielo, ocho o nueve diplomas enmarcados con delicadeza como así, varios trofeos. Uno de ellos me llama la atención por su originalidad ya que es una pequeña estatua en forma de ángel vestido de cocinero con sartén en mano y un gorro muy alto, casi diría que es más grande que el resto del cuerpo. Es de un material que pesa de lo lindo, parece hierro macizo lo compruebo al no poder resistir la tentación de levantarlo un poquito del pedestal que lo sostiene. Cerca de la base , unas letras grabadas en el interior de un sobrepuesto pergamino sujeto con cuatro remaches colocados de forma artística también de metal, rezan el nombre y apellido de ella siguiendo las frases COCINA COMO UN ANGEL con letras artisticamente grabadas y bajo de estas, PRIMER PREMIO AL PLATO DE CAZA. Naturalmente en francés, ya que los obtuvo en París junto con el resto de títulos. Ello hizo, que le dieran una gran oportunidad como segunda cocinera en el restaurante en que yo también trabajo como responsable, es decir como chef. Realmente se los merecía, por ser una gran cocinera muy responsable, limpia y lo más importante NADA DERROCHADORA. Una faceta que un profesional de la cocina siempre tiene que tener. UN COCINERO O COCINERA QUE DERROCHE, SIEMPRE SERÁ UN MAL COCINERO. La economia culinaria de un hogar o restaurante siempre será vital para el buen funcionamiento. Nunca derrochar si no, al cabo de poco tiempo, nuestro bolsillo se quejará y quizás ya será demasiado tarde.
Muy trabajadora, gran profesional y muy sensual
Estoy ansioso por llegar, ya que ayer fué un dia muy agotador y hoy, espero que será un dia relajante. Subo las escaleras con paso lento ya que los escalones son bastante altos y al llegar a la planta superior, la preciosa cocinera Corbeau de origen francés abre la puerta de su piso con decisión, ya que me ha invitado a cenar en su propia casa, además de ser compañeros de trabajo también somos muy buenos amigos. Pronto, veo en la pared de la derecha pintada de un azul cielo, ocho o nueve diplomas enmarcados con delicadeza como así, varios trofeos. Uno de ellos me llama la atención por su originalidad ya que es una pequeña estatua en forma de ángel vestido de cocinero con sartén en mano y un gorro muy alto, casi diría que es más grande que el resto del cuerpo. Es de un material que pesa de lo lindo, parece hierro macizo lo compruebo al no poder resistir la tentación de levantarlo un poquito del pedestal que lo sostiene. Cerca de la base , unas letras grabadas en el interior de un sobrepuesto pergamino sujeto con cuatro remaches colocados de forma artística también de metal, rezan el nombre y apellido de ella siguiendo las frases COCINA COMO UN ANGEL con letras artisticamente grabadas y bajo de estas, PRIMER PREMIO AL PLATO DE CAZA. Naturalmente en francés, ya que los obtuvo en París junto con el resto de títulos. Ello hizo, que le dieran una gran oportunidad como segunda cocinera en el restaurante en que yo también trabajo como responsable, es decir como chef. Realmente se los merecía, por ser una gran cocinera muy responsable, limpia y lo más importante NADA DERROCHADORA. Una faceta que un profesional de la cocina siempre tiene que tener. UN COCINERO O COCINERA QUE DERROCHE, SIEMPRE SERÁ UN MAL COCINERO. La economia culinaria de un hogar o restaurante siempre será vital para el buen funcionamiento. Nunca derrochar si no, al cabo de poco tiempo, nuestro bolsillo se quejará y quizás ya será demasiado tarde.