¡Hola a todos!
Se acercan las navidades y con ella vienen también todos dulces navideños: turrones, galletitas, pannettones, etc… Es ahora, cuando a la mayoría de mortales, nos sale nuestra vena pastelera y nos ponemos a cocinar repostería como locos.
Hoy os hablaré de un ingrediente indispensable para todas estas recetas navideñas: la purpurina comestible, perfecta para decorar tus platos y hacer que brillen con luz propia. Estamos hartos de ver en blogs de cocina e Instagram fotos de galletitas y tartas perfectas, pero cuando lo hacemos nosotros no queda exactamente igual. Pues bien, con la purpurina comestible, podrás disimular los errores de tus recetas, porqué lo tapa todo y no vamos a engañarnos, también queda monísimo.
Existen varias maneras de conseguir purpurina comestible para tus recetas. Puedes comprarla en alguna tienda especializada en cocina o bien, puedes fabricarla tu mismo. A mi parecer, es mucho más cómodo comprarla ya hecha, pero si tienes tiempo y ganas, a continuación te dejo una receta para que puedas hacerlo:
Ingredientes:
10 g. goma arábiga
20 g. agua caliente
Colorante de colores
Procedimientos:
1. Diluimos bien la goma arábiga en el agua calentita (una cucharadita colmada de goma arábiga por cada 8 cucharaditas de agua caliente).
2. Pasamos la mezcla por un colador fino para evitar cualquier grumo.
Dividimos la mezcla de agua y goma arábiga en tantos botecitos como colores queramos hacer.
Teñimos cada una de nuestras mezclas con el color deseado.
3.El siguiente paso lo podemos hacer en el horno o en el microondas.
Con un pincel, extendemos una finisima capa de nuestra mezcla, ya coloreada, sobre la superficie de cristal que vayamos a usar para meterla en el micro.Lo metemos en el microondas o en el horno. Cada micro tiene sus temperaturas y programas así que os aconsejo ir probando. Al final se trata de evaporar la parte de agua y que la superficie que queda se rompa en pequeños cristales. Probad a máxima potencia entre 3 y 4 minutos.
Cuando tenga aspecto reseco, agrietado, está listo! (Consejo: si os gusta como a mi la brillantina finísima, podéis poner una buena capa sobre el cristal, algo más gruesa, al rascar saldrá ya en pequeñísimos trozos. Si por el contrario queréis purpurina más grande, como a pequeñas tiritas, extended una finísima capa sobre el cristal. Al craquelar saldrán trocitos enteros más grandes)
4.Rascamos con nuestra cuchilla la superficie para sacar todo a nuestro papel y picamos a la medida que nos guste nuestra brillantina.
5. No hay más que repetir éste proceso una y otra vez con todas los colores que queramos.
¡Y voilà! Así es cómo se fabrica la purpurina comestible de colores. Para los preocupados por su salud, cabe decir que tanto esta purpurina cómo la que se vende no es tóxica.
¡Ahora ya podéis poneros a preparar galletas, tronquitos de Navidad, magdalenas y pannettones de colores!
Un saludo a todos
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