Ya he preparado anteriormente este pastel en su versión más sencilla, sólo con tres ingredientes. Lo puedes ver AQUÍ. Estaba muy rico y sencillo. Pero, buceando en una revista de cocina me quedé maravillada con la pinta de este pastel de queso japonés. Las fotos eran preciosas y el pastel parecía muy apetecible.
Una vez hecho, debo decir que está bueno, aunque tiene la textura similar a un flan, no parece un bizcocho. Eso sí, es muy esponjoso y rico.
Ingredientes:
- 6 huevos
- 250 gramos de queso crema, tipo mascarpone
- 125 mililitros de leche
- 50 gramos de mantequilla
- 60 gramos de harina
- 20 gramos de harina de trigo maicena
- 170 gramos de azúcar
- el zumo de medio limón
- ralladura de limón
- 1 cucharadita de aroma de vainilla
- una pizca de sal
- 2 cucharadas de azúcar glas
Elaboración
- Calienta a fuego lento el queso junto a la leche y la mantequilla removiendo hasta conseguir una mezcla homogénea. Dejar enfriar.
- Separa las claras de las yemas. Bate las yemas con la vainilla y el zumo y la ralladura de limón, hasta que resulten cremosas.
- Añade la harina y la maicena tamizadas a la mezcla de queso y leche, removiendo hasta integrarlas por completo. Agrega las yemas y mezcla.
- Monta las claras a punto de nieve. Sin dejar de batir, añade la sal y el azúcar, poco a poco, y continúa batiendo para obtener un merengue firme.
- Incorpora el merengue a la masa.
Vierte la mezcla en un molde previamente engrasado.
Cuece al baño María en el horno a 200 grados, durante 18 minutos.
- Baja la temperatura a 160 grados y hornea 35 minutos más. Deja que el pastel se enfríe, desmolda y sirve adornado con azúcar glas.
Fuente: este post proviene de Aquí se cuece jugando, donde puedes consultar el contenido original.
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