Hummus con pan pita y verduras: El hummus es una crema de garbanzos con tahini, limón, ajo y aceite de oliva, que se puede acompañar con pan pita tostado y verduras crudas cortadas en palitos, como zanahoria, pepino, apio o pimiento. Es un bocadillo muy sencillo de hacer y muy rico en proteínas, fibra y vitaminas.
Croquetas de quinoa y verduras: Las croquetas son un clásico de las fiestas, pero también se pueden hacer de forma vegetariana. Solo tienes que cocer la quinoa, mezclarla con verduras picadas, como cebolla, zanahoria, calabacín o espinacas, añadir un poco de harina, sal y pimienta, y formar bolitas que luego se fríen o se hornean. Quedan crujientes por fuera y tiernas por dentro, y se pueden servir con salsa de yogur o tomate.
Brochetas de tofu y champiñones: El tofu es un alimento muy versátil que se puede marinar con diferentes salsas y especias para darle más sabor. Una opción es cortar el tofu en cubos y dejarlo macerar con salsa de soja, miel, vinagre y jengibre. Luego se ensartan en palillos junto con champiñones enteros o laminados, y se cocinan a la plancha o al horno. Son unas brochetas muy jugosas y aromáticas, que se pueden acompañar con arroz o ensalada.
Empanadillas de espinacas y queso: Las empanadillas son otro bocadillo muy popular que se puede rellenar con ingredientes vegetarianos. Una opción es saltear las espinacas con ajo, sal y nuez moscada, y mezclarlas con queso rallado, como mozzarella o feta. Luego se rellenan las obleas de empanadilla con esta mezcla, se cierran bien los bordes y se fríen o se hornean. Son unas empanadillas muy cremosas y sabrosas, que se pueden comer calientes o frías.
Nachos con guacamole y salsa de frijoles: Los nachos son unos triángulos de maíz fritos o tostados que se pueden acompañar con diferentes salsas. Una opción vegetariana es hacer un guacamole con aguacate machacado, cebolla picada, tomate picado, cilantro picado, limón, sal y chile. Otra opción es hacer una salsa de frijoles con frijoles negros cocidos, cebolla picada, tomate picado, comino, sal y chile. Luego se sirven los nachos con las salsas por encima o aparte. Son unos bocadillos muy crujientes y picantes, que se pueden comer con los dedos.
Mini pizzas de calabacín y queso: Las mini pizzas son unos bocadillos muy fáciles y rápidos de hacer, que se pueden personalizar con los ingredientes que más te gusten. Una opción vegetariana es usar rodajas de calabacín como base, y cubrirlas con salsa de tomate, queso rallado, orégano y albahaca. Luego se hornean hasta que el queso se derrita y el calabacín se cocine. Son unas mini pizzas muy ligeras y sabrosas, que se pueden comer con las manos o con un tenedor.
Rollos de lechuga y zanahoria: Los rollos de lechuga son unos bocadillos muy refrescantes y saludables, que se pueden rellenar con lo que quieras. Una opción vegetariana es rallar una zanahoria y mezclarla con queso crema, sal y pimienta. Luego se extiende esta mezcla sobre una hoja de lechuga, se enrolla y se corta en trozos. Son unos rollos muy crujientes y cremosos, que se pueden comer fríos o a temperatura ambiente.
Estos son solo algunos ejemplos de bocadillos vegetarianos que puedes preparar para celebrar un cumpleaños. Hay muchas más opciones que puedes explorar e inventar según tus preferencias y las de tus invitados. Lo importante es que disfrutes de una fiesta saludable, original y deliciosa, que demuestre que ser vegetariano no significa renunciar al sabor ni a la diversión. ¡Feliz cumpleaños!
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