(Scroll down for the English recipe)
Primer asalto del año.
¡Cómo apetecía ya meterse en la cocina de alguien
y hurtar unas cuantas recetas...!
Es lo que tienen los "asaltablogs", que crean adicción, ¡jeje!
Mientras esperamos que nos digan quién será el "desdichado"
que se encontrará su cocina hecha unos zorros,
nos frotamos las manos y pensamos qué tendrá esa cocina que se ajuste a nuestros gustos.
Yo esta vez lo tuve claro y me he traído un bizcocho de leche condensada y nuez moscada que te va a dejar impresionada.
¡Vamos a verlo!
Resulta que este mes, es nuestro primer asalto del año en el reto del Asaltablogs que dirige Marga del blog Azafranes y Canela, donde cada último domingo del mes, publicamos una receta que hayamos hecho del blog que se asalta. Esta vez la afortunada ha sido Maribel del blog Picoteando ideas. Como su propio nombre indica, el blog de Maribel es para pasarse todo el día viendo qué coger, de una página a otra y hacer miles de sus recetas todas deliciosas y sencillas. Y, como no te voy a negar que a mí me encantan los dulces, seguro que si me sigues ya te has dado cuenta, pues le he afanado un recetón, un bizcocho de leche condensada tan jugoso y rico que te aseguro será capaz de comértelo sin ayuda. ¡Qué rico!
Molde Loaf Heritage de Nordic Ware
Nuestra última receta en este reto fue una espléndida tarta de chocolate sencilla, sencillísima y tan rica que te aseguro formará parte de tu menú de cumpleaños en cuanto la pruebes. Su autor original, nuestro querido Guille de No me comes nada, se empeña en que es fantástica y yo digo que la suya lo es más. Así que ve al post y opina por ti misma. Mientras, te voy contando un poco de la historia de la leche condensada que me ha parecido muy curiosa.
¿Sabías que fue durante la Guerra de Secesión de Estados Unidos cuando la leche condensada alcanzó su éxito más rotundo?
Me disponía a hacer este bizcocho de leche condensada y nuez moscada y me puse a buscar en la alacena un bote pequeño de leche condensada que sabía que tenía porque lo había visto, pero no sabía de cuándo era. Cuando lo abrí, la leche condensada había perdido su color y parte de su textura líquida. Estaba más oscura, un color caramelo, y estaba tan espesa como toffee. Me fijé en la fecha y ponía consumir preferentemente antes del 06/2017. Dos años y medio no está mal, ¡jaja! Y aún estaba buena. Era como tomar manjar blanco, dulce de leche hecho de forma natural, en mi alacena; seguro que estos veranos se ha ido cociendo en mi cocina y ha resultado un dulce de leche exquisito. Pero claro, como no me fiaba de que el bizcocho fuera a salir bien con esa textura, preferí comprar un nuevo bote de leche condensada La Lechera y dejarme de experimentos.
Pues como te comentaba, he ido a buscar un poco de información sobre la leche condensada y resulta que es más moderna de lo que yo creía. A Europa no llegó hasta 1866, que empezó a fabricarse en Suiza, en la ciudad de Cham. Y en España, no llega hasta 1910 cuando la empresa Nestlé & Anglo Swiss Condensed Milk Company decide poner una fábrica en La Penilla de Cayón (Cantabria). A partir de entonces, con sus altibajos debido a la guerra, La Lechera ha sido la marca de leche condensada de todos los españoles. Si te apetece saber más sobre cómo surge La Lechera en España, haz click aquí.
El caso es que la leche condensada es fruto de la investigación humana por mejorar los productos naturales no solo para que duren más sino para evitar enfermedades. Gail Borden Jr., su inventor, quedó impresionado, en 1851, después de un viaje a Inglaterra, con la muerte de varios niños a causa de leche en mal estado. Se puso a trabajar en ello y poco después, después de varios fallos, inspirándose en una máquina de vaporización que usaban los Shakers (rama de los Quakers), el neoyorquino Borden creo la leche condensada en 1853. Durante la Guerra de Secesión americana, fue fundamental la leche condensada en el ejército pues permitía que los soldados tomaran leche sin preocuparse de que se fuera a poner mala.
Y a mí me permite que haga un bizcocho como este que te traigo. Sencillo, básico, con ingredientes de andar por casa y con un sabor espectacular que le da la nuez moscada. Si no te gusta esta especia, no se la pongas y punto. El bizcocho seguirá igual de rico. También puedes aromatizarlo con canela, vainilla, o por qué no ralladura de naranja o limón. Te aseguro que te va a gustar de cualquier manera.
Pero, te dejo ya para que veas la receta y la hagas. Coge papel y lápiz y ¡vamos a verla!
BIZCOCHO DE LECHE CONDENSADA Y NUEZ MOSCADA
Ingredientes
3 huevos M
1 cucharadita de nuez moscada molida
100 gr. de nata (crema de leche) para montar +35% M.G. (crema de leche)
75 gr. de aceite de girasol
370 gr. de leche condensada La Lechera
120 gr. de harina normal
16 gr. de levadura química (polvo de hornear)
Grosellas (opcional)
Preparación
Encendemos el horno a 180ºC, calor arriba ay abajo, sin ventilador.
En un bol, batimos los huevos hasta que estén muy espumosos.
Añadimos la nuez moscada y batimos un poco.
Sin dejar de batir, añadimos la nata (crema de leche) (crema de leche) y a continuación, en forma de hilo, el aceite.
Añadimos la leche condensada poco a poco y vamos batiendo hasta que esté totalmente incorporada.
Mezclamos la harina con la levadura y la añadimos a la masa. Batimos un poco y terminamos de mezclar con la espátula.
Engrasamos y enharinamos un molde rectangular de 6 tazas, o un molde Loaf Cake de Nordic Ware como el mío (te dejo el enlace por si quieres saber dónde lo compré).
Llenamos el molde con la masa y damos unos golpecitos en la encimera para que se rellenen todos los huecos.
Horneamos 35-40 minutos o hasta que al pinchar en el centro con un palillo, este salga limpio.
Sacamos y dejamos enfriar en el molde sobre una rejilla durante 10 minutos.
Desmoldamos y dejamos enfriar completamente en la rejilla.
¡A disfrutar!
Paso a paso con fotos
Este bizcocho lo podía haber decorado con un poco de azúcar glas, o a lo mejor con un poco de glaseado o ganache,... pero lo vi tan divino, con esas formas tan bonitas que tiene el modelo Heritage (o si no mira este bizcocho de nata (crema de leche) y nueces que hice también con el mismo modelo pero en versión bundt), que no quería estropearlo así que, lo dejé tal cual. ¿Qué te parece?
¿Quién quiere un trocito?
También podía haberle puesto las grosellas como hizo Maribel pero, no tenía en ese momento y como son opcionales, pues no las puse. Si te apetece, puedes ponerle grosellas o incluso arándanos. Es un bizcocho muy versátil y queda bien con todo. ¿Qué le pondrías tú?
Bueno, creo que ya va siendo hora de terminar este post. En estos momentos me estoy yendo a la cama. Cuando tú lo leas no sé dónde estaré pero recuerda que me hace muy feliz que te pases por aquí y dejes algún comentario; que hagas mis recetas y me mandes la foto; y que me etiquetes en las redes sociales. Así que,...
¡Hasta pronto!
CONDENSED MILK LOAF CAKE WITH A PINCH OF NUTMEG
Ingredients:
3 medium eggs
1 teaspoon ground nutmeg
1/2 cup -1 Tablespoon whipping cream
1/3 cup vegetable oil
1 1/4 cup condensed milk
3 teaspoons baking powder
1 cup all-purpose flour
Directions:
Heat the oven to 350ºF, heat up and down, no fan.
In a large bowl, beat eggs until foamy.
Add nutmeg teaspoon and mix.
Gradually, add whipping cream and stir.
Gradually pour oil while beating and mix until homogeneous.
Gradually, pour condensed milk and beat until homogeneous.
Mix baking powder and flour. Add to the batter and mix just to combine. Finish beating with a spatula.
Grease and flour a loaf mold and pour batter inside.
Bake for 35 minutes or until a toothpick inserted comes out clean.
Remove from the oven and let stay on a rack for 10 minutes.
Remove from the mold, and let cool completely before serving.
Enjoy!!
I hope you like it!
See you soon!
Fuente: este post proviene de Pattys Cake, donde puedes consultar el contenido original.
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