Consejo 1: “La técnica no es lo más complicado de enseñar; la actitud que toma un chef es lo que realmente importa. “- Alain Ducasse.
Realmente es así. Los conocimientos técnicos son la punta del iceberg a la hora de convertirte en un chef. Lo que verdaderamente marca la diferencia es el hecho de tomar una actitud positiva y activa frente a la cocina: escuchar para aprender, no tomarse los errores como fracasos sino como aprendizajes, tratar con “cariño” y dedicación los platos y todos sus componentes
Consejo 2: “Involucrarte en las cosas, aprender por experiencia, observar el oficio y absorber todo lo que puedas, hace que sea más sencillo definir lo que realmente quieres. Al final, eso también te hará un mejor chef.” – Anne Burrell
Esta frase de la chef Anne Burrell va muy ligada al primer consejo: es fundamental adquirir una actitud en la que los cinco sentidos se activan dentro de la cocina. Al ser capaz de aprender de absolutamente todo lo que ocurre a tu alrededor es cuando perfeccionaremos nuestra capacidad profesional y personal como chefs.
Consejo 3: “Un buen restaurante no se define por tener pocos errores, sino por cómo maneja esos errores que tenga. “- Danny Meyer
Efectivamente, como dijo el sabio Danny Meyer (y como nosotros hemos mencionado en el primer consejo de todos) los errores dentro de cocina no deben desmotivar al personal y mucho menos al chef, los debemos aprovechar como enseñanzas para el futuro. Nadie alcanza la cima sin haber tropezado antes y eso es lo que verdaderamente nos aporta la experiencia.
Consejo 4: “El secreto tras una cocina exitosa está en tres palabras: sé firme, sé justo y sé amistoso, con tu personal, tus comensales y contigo mismo.” – Will Gilson
Es muy importante tener paciencia a la hora de trabajar, pero también tener unos límites establecidos a la hora de trabajar, no solo para los jefes o superiores sino para todos y cada uno de los trabajadores de un restaurante, empresa, organización El lugar de trabajo debe ser respetado por todos para lograr una armonía y eficacia que permita maximizar la productividad por parte de los trabajadores. Buen rollo: sí, pero sobre todo respeto.