La frescura del mar se traslada a tu mesa de la mano de sus inquilinos: los pescados. En este reportaje queremos presentarte al besugo. Con un delicioso sabor y gran cantidad de nutrientes es una de las opciones para que los más pequeños aprendan a disfrutar de los productos que el mar nos ofrece. Además, admite distintos complementos que realzan su presentación ante el paladar.
Este pez, habitante de las costas europeas del Atlántico y del Mediterráneo, vive formando bancos pequeños que pueblan las zonas más arenosas del medio acuático, preferiblemente hondas. Como carnívoro que es, se alimenta de larvas y peces pequeños, gracias a los cuales puede llegar a alcanzar los 6 Kg. de peso.
El verdadero besugo
Si no quieres llevarte a casa el producto equivocado, debes saber cuáles son las características que diferencian este pez de otros de su misma familia, los Espáridos, como la breca, el aligote o el bicudo. Estos últimos, aunque tienen un sabor exquisito, no alcanzan la calidad de su pariente.Sin lugar a dudas, su rasgo más destacado es la mancha negra que posee por encima de las aletas pectorales, las llamadas 'huellas de los dedos de San Pedro'. Los ejemplares más jóvenes aún no la habrán desarrollado por lo que sí pueden confundirse con otras especies.
Otro signo para reconocer este pescado en su estado fresco es su color grisáceo, con un ligero tono rojizo, que pasa del oscuro de la cabeza al claro del vientre. Una pieza de baja calidad habrá perdido la viveza de las tonalidades de su piel.
Cuando acudas a comprar cualquier pescado, recuerda que existen unas tallas mínimas que garantizan el correcto desarrollo de los peces y su calidad. El FROM (Fondo de Regulación y Organización del Mercado de los Productos de la Pesca y Cultivos Marinos), en colaboración con el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, sigue insistiendo en su campaña contra la pesca de "pezqueñines". En el caso del besugo, debes saber que si ha sido pescado en el Cantábrico o en el Golfo de Cádiz (Pagellus bogaraveo) su largo será al menos de 25 cm, mientras que si procede de los caladeros mediterráneos (Pagellos spp), será de 12 cm.
Besugo para tu organismo
Aunque se trata de un pescado blanco o magro, con un aporte de grasas por debajo del 2,5%, durante los meses de noviembre a febrero, aumenta la concentración de éstas situándose casi en los límites entre los considerados semigrasos y los azules.
Vitaminas y minerales son otros de los nutrientes que aporta. Entre las primeras destacan la A, la B1, la B2 y la B3. Mientras que entre los minerales más presentes en el besugo encontramos: fósforo, hierro, magnesio, sodio, zinc y potasio.
Como otros pescados, puede que el besugo contenga anisakis. Para erradicarlo, tendremos que congelar la pieza, ya que estos parásitos son muy sensibles al paso del calor al frío, y viceversa.
El besugo en el plato
Son múltiples las formas de cocinar este pescado, aunque son las elaboraciones más sencillas las que conservan y nos dejan disfrutar de su mejor sabor. Generalmente, se prepara asado al horno, a la plancha o a la parrilla, de cualquiera de estas maneras mantendremos sus nutrientes y textura característica.Como condimentos, son estrellas el aceite de oliva, la sal o el limón. Todos ellos aportan un toque mediterráneo a la elaboración del plato. Si queremos acompañar el besugo, podemos optar por tres fantásticas opciones. En primer lugar, unas patatas panadera; la segunda idea es una ensalada mixta tradicional; y por último, es posible añadir unas verduras frescas al mismo tiempo que realizamos el asado del pescado en el horno.
Innova y crea tus propias combinaciones, pero si todavía no sabes por dónde empezar te proponemos algunos platos cuya estrella es el besugo.
Recetas de besugo:
Besugo mechadoBesugo a la espalda
Besugo al horno
Besugo a la sidra
Besugo a la roteña
