Gambas al ajillo: versión suave

Las gambas al ajillo son un plato muy típico de nuestra gastronomía. Aquí en Andalucía las puedes encontrar en la carta de casi cualquier restaurante y tienen mucho éxito. Habitualmente son bastante picantes, ya que llevan mucho ajo, así que hoy hemos decidido prepararlas pero en una versión más suave para que toda la familia pueda disfrutarlas. ¿Quieres saber cómo? ¡Te lo contamos! 

Para esta receta lo único que necesitas son las gambas peladas, aunque se puede preparar con otro marisco que prefieras como langostinos y gambones, y los ingredientes que quieras usar para condimentarlas. En nuestro caso hemos utilizado aceite de oliva (siempre virgen extra), nuestra mezcla de chili powder, nuestro ajo-perejil seco y un poco de sal negra del Himalaya. Es muy importante a la hora de preparar este plato que las gambas estén bien secas para que no suelten demasiada agua durante la cocción, por lo que es mejor secarlas un poco con papel de cocina antes de añadir las especias. Si utilizas gambas congeladas se recomienda dejarlas descongelando la noche anterior en el frigorífico.

Primero hemos condimentado las gambas. Les hemos echado el aceite de oliva generosamente, y después hemos añadido todas las especias: el chili powder, el ajo-perejil y al final el toque de sal negra. Las cantidades dependen sobre todo del gusto, nosotros hemos utilizado aproximadamente una cuchara de chili powder y otra de ajo-perejil. Removemos bien para que todas las especias se mezclen entre sí e impregnen todas las gambas y lo llevamos al horno. Nosotros las hemos cocinado en una cazuela de barro, ¡están para chuparse los dedos!

Os dejamos por aquí el reel de Instagram preparando este plato:



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¿Qué te parece? ¡No puede ser más fácil y más rico! ¿A ti te gustan las gambas al ajillo? ¿Las has preparado alguna vez? ¡Cuéntanoslo en comentarios y por Instagram! Nos encanta leeros