Los canelones, son el plato festivo que creo que más adeptos tiene. Desde hace casi 40 años, cada Sant Esteve, me toca hacer los canelones, es un ritual y todavía recuerdo cuando en mis primeras comidas después de casarme, me hacían la broma de preguntarme si los sabía cerrar bien. Si recordáis las placas hacen unos piquitos y la gracia estaba en que encajaran perfectamente para que estuvieran más buenos.
Eso es pura anécdota, pero está claro que con un relleno jugosito y bastante lleno los canelones son mas apetitosos.
Ingredientes:
Relleno de los canelones
2 cucharadas de mantequilla2 cucharadas de aceite
800 grs. de pechuga de pollo
600 grs. de carne magra de cerdo
1 bloc de foie grass
1 vasito de coñac
1/2 litro de caldo
sal y pimienta
queso rallado abundante
Placas para los canelones.
En función del resto de platos, contar cómo mínimo con 3 por persona.
Bechamel
60 grs. de mantequilla60 grs, de harina
1 nuez moscada rallada
3/4 litros de leche
sal y pimienta.
Preparación.
Empezamos a preparar el relleno:Ponemos en una cazuela la mantequilla y el aceite, cuando está la mantequilla disuelta, añadimos la carne cortada a trocitos, lo rehogamos hasta que tiene un color dorado, en este momento añadimos el foie grass, que poco a poco se va deshaciendo.
Añadimos a continuación el coñac, y dejamos que se evapore el alcohol y conseguimos que empiecen a preguntar cuando estarán listos por el aroma que desprende. Tras esta operación, podemos añadir ya el caldo para que hierva y se ponga todo tierno.
Mientras está hirviendo, podemos iniciar la bechamel.
En una cacerola antiadherente, ponemos la mantequilla, añadimos la harina, y la nuez moscada. Todo junto lo empezamos a mover con unas varillas, y en cuanto se haya dorado un poquito, podemos ir añadiendo la leche que deberá estar a temperatura templada, nunca fría, movemos con las varillas y así evitamos que se hagan grumos, iremos observando el punto de espesor de la salsa, pensando que tiene que cubrir posteriormente los canelones, se salpimienta, y se deja que cueza bien para evitar el sabor a harina cruda.
Volvemos a nuestra carne, ya está cocida y debemos picarla, Lo hacemos con la picadora, pero pensando que no es necesario que sea puré. Le daremos una vuelta en la cazuela, y para que quede más jugoso se le añade unas cucharadas de bechamel.
Cogemos las placas, tenemos 2 posibilidades, utilizar las que es necesario hervir, o bien las que solo las ponemos en remojo, en ambos casos seguir las instrucciones del paquete. Cuando están en el punto, las disponemos encima de un paño de algodón para que recoja el exceso de agua.
Cuando tenemos las placas preparadas, empezamos a rellenar los canelones. Se va colocando una cantidad generosa, pero que nos permita cerrar la placa, y las colocamos en una fuente que pueda ir al horno. Cuando están todos, añadimos la bechamel por encima, que queden bien cubiertos y añadimos abundante queso.
Los colocamos al horno, hasta que obtengan su punto de gratinado que nos guste.
Después a disfrutar con ellos.