Más sobre el altramuz
Aparte de los beneficios para la salud que nombramos al principio, el altramuz fortalece el sistema inmunológico gracias a que contiene fibra y hierro, en una cantidad que supera a una ración de espinacas. Como es una legumbre, nos brinda hidratos de carbono.
Por otro lado, en España se suelen comer como aperitivos salados, siendo una alternativa más saludable que las patatas fritas y otros tipos de aperitivos de este tipo. Eso sí, los altramuces vienen en salmuera, por lo que si sufres de tensión alta, debes tener mucha precaución al degustarlos. Son más consumidos por el sur de España, para acompañar un vino o cerveza. Ahora veamos un dato interesante sobre el altramuz sin pelar.
En lo que respecta al tema sobre si nos hacen subir de peso o no, 100 gramos de altramuz sin pelar tiene 428 calorías. Esto significa que si no se comen con moderación, son capaces de hacerte engordar. Entonces la próxima vez que los veas en una fiesta o restaurante, cómelos con mucha mesura.
Cómo comerlos
Si quieres comprarlos, puedes conseguirlos envasados en alguna tienda que venda artículos encurtidos y aceitunas. Hablando de su apariencia, son blandos, aplanados, húmedos y de color amarillo. Al momento de intentar comerlos, hay que removerles la piel en la boca. Los altramuces son algo insípidos, por lo que se les agrega sal por encima.
Como dato curioso, los altramuces vienen de una planta que se cultivaba antes de la época de los romanos. En su forma natural, son secos como las lentejas y el altramuz sin pelar se daba como alimento a ciertos animales. En épocas contemporáneas, se les deja en remojo para que se ablanden y eliminen el sabor amargo natural que poseen. Después hay que cocerlos, con agua nueva fría.