1 vaso de leche.
1 vaso de harina.
1 huevo.
Azúcar para espolvorear.
Canela.
Aceite de oliva.
Una poco de sal.
Mezclar la leche con el huevo batido y con una pizca de sal. Agregar la harina poco a poco y mover hasta lograr una masa fina, homogénea. Estará en el momento que la masa quede pegada levemente a una cuchara. Ir vertiendo la cucharadas de masa en una sartén con abundante aceite de oliva muy caliente, (que se fríen por separado). Al sacarlas en caliente espolvorearlas con azúcar y canela en polvo. Es una receta deliciosa, con unas pocas calorías pero que de vez en ´cuando también se deben consumir. Los papajotes se suelen comer acompañados con una taza de chocolate caliente. (Mmmmmmmmmmmmm que rico) ¿Qué os apuntais a probarlos?