Sin duda es una opción mucho más saludable que comprar una pizza precocinada en el supermercado. Además, nos encanta poder elegir cada uno de los ingredientes y poner nuestro toque creativo. Además de enseñaros a preparar esta estupenda masa de pizza integral, os enseñaremos dos versiones diferentes de pizza. No sabemos elegir la que nos gusta más, así que os lo dejamos a vosotros.
Sigue leyendo para aprender a preparar la MASA de pizza con harina de espelta integral
Opción 1: Pizza al estilo mediterráneo.
Una vez cocinada la masa, simplemente añadimos por encima los siguientes ingredientes:
Canónigos (podéis usar rúcula u otro tipo de hojas)
Queso tierno
Jamón serrano
Tomate cortado
Aceitunas
Orégano
Aceite de oliva virgen extra
Sal Opción 2: Pizza con cebolla caramelizada y garbanzos especiados
A lo mejor os parece una locura esta combinación. La otra era más tradicional. Vimos en un restaurante esta idea de añadir garbanzos tostados como “topping”… ¡y nos encantó! Si os gusta innovar y probar nuevas combinaciones… tenéis que animaros a probarla.
Una vez la masa está prácticamente cocinada, le añadimos los siguientes ingredientes.
Cebolla caramelizada
Rodajas de mozzarella fresca
Garbanzos especiados al horno. ¿Cómo se preparan? ¡Muy fácil! Podemos usar garbanzos cocidos de bote. Los mezclamos con aceite de oliva, cúrcuma, comino y pimentón picante. Se colocan en una bandeja de horno y los horneamos hasta que estén crujientes. Podéis preparar bastante cantidad y guardarlos para tomar como un snack saludable o añadirlos a otros platos (quedan perfectos en ensaladas o cuscús)
Tomate troceado
Unos trocitos de queso de cabra
Perejil picado
Aceite de oliva virgen extra
Sal Una vez montada la pizza, podemos hornearla durante unos minutos más para que el queso se funda.
Masa de pizza con harina de espelta integral
Ingredientes
180 ml de agua caliente
1 cubito de levadura fresca
1/2 cucharada de azúcar
1 cucharada de aceite de oliva virgen extra
280g de harina de espelta integral
1 cucharada de sal Preparación
Mezclamos el agua caliente, la levadura y el azúcar hasta que esté la levadura disuelta. Lo dejamos reposar unos 5 minutos o hasta que se haya formado una capa de espuma. Mientras tanto, vertemos la mitad de la harina en un bol junto con la sal.
Una vez se ha formado la espuma, añadimos el aceite de oliva y mezclamos. A continuación vertemos esta mezcla en el bol que contiene la harina y la sal. Mezclamos hasta formar una masa. Vamos añadiendo poco a poco el resto de la harina, hasta formar una bola de masa.
Amasamos sobre una superficie con harina. Dejamos la masa en un bol cubierto con un paño y lo dejamos reposar hasta que doble su volumen.
Precalentamos el horno a 200ºC.
Extendemos la masa y formamos una base. En este caso yo he hecho dos para ponerle diferentes ingredientes por encima.
Horneamos la masa hasta que esté prácticamente hecha.
Lo sacamos, añadimos los ingredientes que queramos por encima y horneamos durante unos minutos más. 4.21
Las dos versiones que os hemos enseñado son las que nos salieron con lo que teníamos por casa. Esperamos que os sirvan para que tengáis más ideas a la hora de preparar una pizza de la que podáis disfrutar todos.
Pero tenemos mucha curiosidad… ¿con cuál de las dos os quedáis? ¡Déjanos un comentario! Y si os animáis a probar otras combinaciones no dudéis en compartirlas con nosotras, nos encanta ver lo que cocináis
¡Hasta la próxima!
Patricia y Carlota.