Otra de las ventajas de preparar este tipo de postres es que podemos aprovechar mejor el tiempo de espera. En lugar de tener que estar cerca de la cocina para verificar que no se nos queme nada en el horno, podemos hacer otras cosas. Por ejemplo, mientras esperamos por este postre frío, podemos incluso salir de casa sin problemas o hacer otras actividades importantes. Entonces, vamos a ver cuáles son los ingredientes que vamos a necesitar para la preparación de este riquísimo pie de limón sin horno. Luego simplemente pongámonos manos a la obra.
Los ingredientes que vamos a necesitar para la preparación de esta riquísima receta de torta fría son:
1 cucharadita de canela en polvo
1 cucharadita de azúcar
2 cucharadas de mantequilla
200 ml de crema de leche
200 ml de leche condensada
Zumo de 2 limones
Ralladura de 1/2 limón
1 sobre de gelatina de limón
1 paquete de galletas dulces tipo María
Tarta de limón sin horno, pasos para la preparación de este delicioso y sencillo postre:
El primer paso que debemos llevar a cabo para la preparación de esta deliciosa Tarta de limón sin horno es preparar y medir los ingredientes. Es importante tener todo medido a la mano, de ese modo no nos faltará nada a última hora. Entonces, haremos de primero la base de nuestra tarta sin horno. Para ello, tomaremos las galletas dulces y las vamos a triturar hasta hacerlas polvo. Podemos hacer esto en la licuadora, que debe estar muy seca. También podemos meterlas en una bolsa de plástico que no tenga huecos, y triturarlas con un mazo o con el rodillo.
La idea es que queden como una especie de harina, que queden bien trituradas. Una vez hecho esto, vamos a añadir la cucharadita de azúcar y la canela en polvo y mezclaremos bien. Ahora vamos a darle consistencia a esta mezcla. Para ello, vamos a derretir la mantequilla en el microondas. Cuando esté bien líquida, la vamos a añadir a las galletas trituradas.
Con ayuda de las manos (muy limpias), vamos a comenzar a amasar. La mantequilla derretida le dará consistencia a la mezcla, haciendo que se forme una especie de masa. Una vez que todo se haya juntado bien y obtengamos una masa bien consistente, vamos a colocarla en el molde. Si quieres, puedes utilizar un molde “desmoldable”. Pero uno de vidrio o de plástico te servirá igual, porque esto irá al refrigerador. Esto le dará la consistencia perfecta a la base de nuestra Tarta de limón sin horno.
Aplasta bien la base
Con ayuda de nuestras manos, vamos a esparcir bien la masa por toda la base del molde. Debemos intentar que quede lo más compacta posible. Si lo deseas, puedes usar un vaso de base plana para aplastar un poco la masa contra la base del molde. También puedes cubrir una parte de los laterales si quieres que quede la tarta de base alta. Si no, será solo la parte de abajo del pastel. Esto dependerá de tu gusto y de lo que se te haga más cómodo.
Una vez hecho esto, llevaremos el molde al refrigerador mientras preparamos el resto de la receta. El siguiente paso lo podemos hacer en la batidora eléctrica o con un batidor de mano, dependiendo de lo que tengas en casa. Entonces, añadiremos en un recipiente la crema de leche con la leche, que debe estar bien fría. Para esta Tarta de limón sin horno incorporaremos también el zumo de limón y la ralladura.
Seguiremos batiendo muy bien para que todo quede perfectamente integrado. Una vez que hayas mezclado esto, vamos a vaciar esta mezcla encima de la base de galleta que hemos preparado, y volveremos a dejar esto en el refri. La dejaremos ahí durante unas 4 horas para que cuaje bien. Una vez pasado este tiempo, vamos a preparar la gelatina de limón. La haremos siguiendo las indicaciones del paquete. Una vez mezclada, pero aún líquida, la vamos a vaciar sobre la mezcla de la tarta, que ya debe estar dura.
Llevaremos esto de nuevo al refrigerador por unas 2 horas más. De este modo la gelatina se cuajará bien y formará una capa de limón deliciosa encima de nuestra Tarta de limón sin horno. Listo, podemos servir y disfrutar. Si lo deseas, puedes cambiar la capa de encima. En lugar de utilizar gelatina, puedes colocar una capa de merengue casero y rociarlo luego con ralladura de limón o canela.
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