Ayer, Silvia, tuvo un antojo culinario, raro en ella, le apetecieron unos tortellini y como para no hacer caso a las mujeres
Pues, fuimos al supermercado y entre otras cosas compramos unos tortellini rellenos de carne.
Como me toco cocinarlos a mí y no tenía demasiadas ganas de cocinar, opte por acompañarlos de una salsa de tomate de bote, que teníamos perdido un tetrabrik de tomate frito perdido por la cocina desde el siglo pasado.
Ingredientes (2 personas):
150 g de tortellini rellenos de carne
1 cebolla pequeña
200 g de tomate frito
1/2 cabeza de ajos
1 pastilla de concentrado de carne
100 ml de nata (crema de leche) de cocinar
Orégano
Aceite de oliva
Sal
Preparación:
En primer lugar cocemos los tortellini según las instrucciones del fabricante.
Generalmente se colocan en una olla con abundante agua hirviendo, a la cual le añadimos la pastilla de concentrado de carne, durante unos 15-20 minutos o hasta que estén con la textura que deseemos.
Dejamos escurrir.
Pelamos y troceamos en juliana la cebolla.
Pelamos y fileteamos los ajos.
Mientras, en una sartén amplia, calentamos un generoso chorro de aceite de oliva para freír la cebolla y los ajos.
Freímos en dicho aceite, la cebolla y los ajos, hasta que la cebolla este tierna.
Añadimos el tomate frito, la nata (crema de leche), el orégano, removemos y probamos para rectificar el punto de sal, si fuera necesario.
Añadimos los tortellini escurridos, removemos nuevamente y dejamos espesarse la salsa a fuego medio unos 10-15 minutos.
Servir y comer.