Hoy tengo el placer de traeros una receta de mi abuelo, era un plato que le salía riquísimo y que hemos ido heredando tanto mi madre como yo y que en casa nos encanta. Espero que a vosotros también os guste, hoy en el blog: ajillo.
Ingredientes para tres personas.-
Una patata pequeña
Cuatro ajos tiernos
Cuatro vasos de agua
Cuatro puñados de harina
Sal
Pimienta
Pimentón
Aceite
Preparación.-
Se parte la patata en rodajas finas como para tortilla.
Se pican los ajos tiernos en trocitos muy pequeños.
Se pone aceite en la sartén y se sofríe la patata.
A continuación se añadirá el ajo.
Ahora añadimos dos cucharadas de pimentón dulce y apartamos del fuego mientras removemos para que no se queme, si el pimentón llegara a quemarse, amargaría.
Añadimos los cuatro vasos de agua y damos unas cuantas vueltas.
Cuando ya esté todo más o menos incorporado, añadiremos la harina y daremos vueltas con el fin de que no se hagan grumos.
Si se hacen grumos hay que ir apretándolos para que se vayan deshaciendo.
Poco a poco, irá tomando una textura cremosa, cuando ya veamos que la textura es de una crema espesa y no queden grumos, añadiremos sal y la pimienta.
Seguiremos dando vueltas hasta que dé el primer hervor, lo dejaremos durante quince minutos más sin parar de remover ya que empezará a pegarse.
Servir y comer caliente.
A disfrutar.
Fuente: este post proviene de Cocinando para cien mil vikingos, ¿Qué hago de comer hoy?, donde puedes consultar el contenido original.
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