Una de las principales ventajas que tiene este tipo de freidoras sin aceite es que te permite ahorrar mucho tiempo a la hora de su limpieza ya que al ser aparatos pequeños son muy fáciles de limpiar si lo comparas con un horno, en esta web puedes ver más detalle sobre estos aparatos, pero al ser eléctricos tienes cuidado en su limpieza y mantenimiento para así alargar la vida útil de sus componentes y poder disfrutar de tu freidora de aire por mucho tiempo.
¿Cómo se debe limpiar la cesta de la freidora?
Lo primero es separar ambas cestas. La cesta antiadherente es la que debemos tener más cuidado y recomendamos limpiarla con una esponja suave, con un poco de lavaplatos y si el agua está caliente mucho mejor porque es más fácil despegar la grasa, si ves que quedan residuos en los agujeros de la cesta puedes pasarle un cepillo fino o un cepillo de dientes, ya verás cómo no se le resiste ninguna suciedad de las ranuras, por último una vez lavada la cesta es importante secarla con un paño de microfibra seco o con papel absorbente para quitar todos los residuos de agua y así evitar que con el tiempo se oxiden los materiales.
Para la cesta donde se depositan las grasas resultantes del cocinado podemos hacer lo mismo: limpiarla con una esponja suave, con un poco de lavaplatos y agua caliente. Si ves que después de limpiarla todavía le queda el olor a comida y le puedes agregar un poco de vinagre y la dejas en remojo unos minutos, con este truco eliminarás los malos olores que hayan podido quedar en el recipiente, te invitamos a que lo pruebes ya verás cómo te sorprende el resultado. Si eres de lo que les gusta dejar todo sin rastro de olor puedes introducir también la cesta antiadherente a la vez.
Hoy en día la mayoría de cestas son compatibles con el lavavajillas, es tan simple como separar las cestas e introducirlas en el lavavajillas como hacemos con los demás utensilios de cocinas. Pero nosotros recomendamos lavarlas a mano para extender la vida útil del material antiadherente que incorpora la cesta.
