La LECHOSA O PAYAYA, es una fruta originaria de America. Conocida por su multitud de nombres como "melón de árbol", "melón zapote", "fruta bomba" o "lechosa", entre otros, su aroma recuerda al melón y el dulzor de su pulpa al de la pera, el melón o la fresa. Tiene la ventaja de que se puede comprar durante todo el año, si bien se encuentra en su mejor momento en los meses de principio y fin de año.
La papaya está madura cuando su piel pasa de tener un color verde a un tono amarillento. Es frecuente que la piel presente algunas motas marrones, lo que no afecta en absoluto a la calidad de su pulpa. A la hora de adquirirlas, se recomienda escoger aquellas que tengan cerca de tres cuartas partes amarillentas (nunca verdes del todo, ya que no maduran completamente) y que sean firmes -nunca blandas- cuando se presionen suavemente.
Es una fruta que posee propiedades digestivas. Su pulpa de color rosado contiene papaína, una enzima proteolítica, es decir, con capacidad para digerir las proteínas de los alimentos, al mismo tiempo que pepsina, una enzima presente en nuestros jugos gástricos.
Además, también se le atribuye otras propiedades beneficiosas. Combate el estreñimiento, tienen gran cantidad de vitamina C (supera a la naranja y pomelo) y ayuda a eliminar los parásitos intestinales, entre otras. Su composición nutricional incluye, asimismo, cantidades de vitamina A, vitaminas del complejo B, potasio, magnesio, fibra y ácido fólico nada desdeñables, así como pequeñas cantidades de calcio y hierro.