Vamos a comenzar haciendo la base, para ello troceamos las galletas en una picadora o con un rodillo, hasta obtener galleta molida. Ponemos la mantequilla en un bol, incorporamos 80g de mantequilla derretida, un chorro de vino blanco y un poco de canela al gusto.
Vamos a utilizar un molde desmontable y con un poco de mantequilla engrasamos la base y las paredes.
Hechamos la base de galletas y con la ayuda de las manos la vamos a ir apretando hasta que no quede ningún agujerito,también cubrir un poco las paredes, pero lo importante es que no quede NINGÚN AGUJERITO!!
En un vaso de batido hechamos 3 huevos, la leche condensada y el ques
o batido, batimos.
Vertemos la mezla sobre la base de galleta, y ponemos al horno unos 45 minutos.
Una vez finalizado la vamos a dejar enfriar dentro con la puerta del horno abierta, para que no se desinfle.
Cuando ya este en temperatura ambiente, la colocamos en la nevera unas horas para que coja consistencia.
En el momento de servir la desmoldaremos y la cubrimos con la mermelada que más nos guste!
Et voilà!! :)
Yo no le puse mermelada ya que a nosotros no nos gusta mucho, pero con mermelada también tiene que quedar muy rico:)