Congelar los alimentos es uno de los métodos más efectivos para asegurarnos el llevar a nuestras mesas alimentos en estado óptimo y, además, nos permite preparar grandes cantidades de ellos para tenerlos a nuestra disposición, prácticamente listos, en el momento en que queramos.
A continuación, encontraréis una serie de recomendaciones para congelar los alimentos que os harán mucho más llevadero el cocinar, y os ayudarán aprovechar mejor los alimentos.
Este es el truco del que siempre echo mano cuando voy a cocinar. Cuando vamos con tiempo, nos da igual entretenernos picando las verduras y hortalizas. Pero, hay otras veces que vamos con el tiempo más ajustado y es, en estas ocasiones, cuando echar mano de una de estas bolsitas congeladas con nuestra combinación de hortalizas y verduras, preparada por nosotros mismos y en la cantidad que necesitamos, es una gozada.
Y sí, seguro que estáis pensando que ya las venden en el súper. Pero en el caso de prepararlas nosotros mismos, contamos con las ventajas de, elegir nosotros el producto que vamos a congelar, en la cantidad que queramos, y combinarlo con el resto de ingredientes que habitualmente utilicemos en nuestros sofritos.
Este truco también os será muy útil en el caso de que tengáis huerto y, en determinados periodos del año, os veáis desbordados por toda su producción. La solución, congelar en bolsas aptas para el congelador y, ya preparado en la forma y cantidad en que vayáis a utilizarlo. Si queréis saber más acerca de la congelación de verduras y hortalizas, podéis hacerlo en Para estar por casa.
Si sois de los que preparan sus propios panes y bollería casera, deberéis saber que si los congeláis en rebanadas o en porciones individuales, después de descongelados estarán igual de frescos que si estuviesen recién hechos. Así que, a partir de ahora no tengáis miedo de preparar más cantidad de la cuenta, siempre y cuando tengáis un congelador grande, porque con la ccngelación aguantan perfectamente y ni se nota que haya pasado tiempo por ellos.
Es el caso, por ejemplo, del pan de molde. Muchas veces, porque no nos de tiempo a consumirlo en fecha o porque sae un pan de molde casero, que aguantan menos al no llevar conservantes, podemos recurrir a congelarlo en rebanadas para así tenerlo disponible e ir sacándolo a la medida que lo vayamos necesitando. Sólo es cuestión de organización: con sacar el pan fuera del congelador, unas horas antes, será suficiente.
De consejos de congelación de todo tipo de panes y todo tipo de bollería, sabe mucho Verónica de Cocinando para mis cachorritos.
¿Os gustan las croquetas? Seguro que sí, ¿a quién no?. Pues las croquetas también se pueden congelar, una vez formadas y pasadas por huevo y pan rallado, podemos meterlas en un táper y, bien tapadas, llevarlas al congelador. De esta forma, tendremos croquetas listas para freír en cualquier momento. Sólo es cuestión de dedicarles un rato el día de prepararlas y darles forma, y después con una buena cantidad de ellas en el congelador, sólo tendremos que ir sacando la cantidad que necesitemos. Aguantan bastante tiempo en el congelador. A la hora de freírlas, eso sí, el aceite debe estar muy caliente porque perderá temperatura al ponerle las croquetas congeladas. Un consejo, no pongáis muchas a la vez para que no se enfríe el aceite.
A la hora de formarlas, para que nos salgan perfectas, hay un truco que además de darles mejor forma, nos hará ahorrar en tiempo. Es tan sencillo como poner la masa en una manga pastelera y, sobre una bandeja ir formando tiras largas de masa que después iremos cortando al tamaño que más nos guste de la croqueta. Lo veréis mucho mejor en el blog de Isabel, Cocina con Reina.
Muchos más trucos de este tipo podrás encontrar en el blog Para estar por casa. Puedes seguirlo también a través de FACEBOOK, TWITTER PINTEREST y GOOGLE +.