Durante estos días de confinamiento, hemos optado, muchos, por hacer pan.
Yo, he retomado el blog de recetas. Llevaba parado mucho tiempo, demasiado.
Tal vez, había sanado, y no tenía necesidad de esta terapia.
Pero me da a mi... que tal vez me engañaba.
Necesito cocinar. Necesito evadirme buscando sabores, texturas... Y, sobre todo, transmitir, hacer sentir.
Nos vamos de viaje. Australia nos espera. Y su Damper maravilloso.
¡Mánchate de blanco!.
Ingredientes:
300 gr. de harina "bizcochona" (con impulsor)
200 ml. de agua
6 tomates secos picados
1 pellizco de sal
1 cucharada sopera de albahaca (esta, es en aceite)
Fácil, fácil, muy fácil.
Picamos los tomates secos y mezclamos los ingredientes. Así, sin más.
Buscamos un molde circular, o la base de un molde circular para horno.
Pintamos de aceite ligeramente y extendemos la masa sobre el círculo.
Si se te pega mucho a los dedos, pintatelos de aceite.
Horno a 220º.
Haz unas marcas antes de meterlo al horno, para poder partirlo mejor, después.
En cuanto veas que se empieza a dorar, unos 20 minutos aprox.
Yo, me he preparado una "tapita" con tomates confitados y anchoas.
Aquí os dejo un enlace para que veáis como se prepara este pan, en Australia, para los niños.
Fuente: este post proviene de Sabor en cristal, donde puedes consultar el contenido original.
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