Últimamente teníamos muchas recetas dulces para subir, y se nos había olvidado que sólo de dulces no nos alimentamos, ¡aunque nos encantaría! jajaja
El estofado de albóndigas es un plato tradicional y muy fácil de preparar. Eso sí, requiere de un poco de tiempo si queréis preparar las albóndigas vosotros mismos.
Esta receta es de familia, mi madre la aprendió de mi abuela, y ella me la ha enseñado a mí, y seguro que la repetiremos porque es un plato riquísimo.
Además si lo acompañamos con una rica ensalada, tenemos una comida ¡muy completa!
INGREDIENTES
Para las albóndigas (5-6 personas):
- 500 gr de carne picada (puede ser sólo de ternera o mezclada con carne de cerdo)
- 2 dientes de ajo picados muy fino
- 1 huevo
- 1 rebanada de pan de molde + un poco de leche
- 3 cucharadas de pan rallado aproximadamente (aquí tenéis que ver cuánto pan admite la carne, lo justo para poder formar bien las albóndigas)
- Harina para enharinar
- Aceite para freír
Para el guiso:
- 1 cebolla grande
- 1 diente de ajo
- 1 cucharada colmada de harina
- 1 hoja de laurel
- 1 cucharadita de pimentón dulce
- 4-5 patatas grandes
- 1/2 cucharadita de nuez moscada
- 1 pizca de colorante amarillo
- 1 pastilla de caldo concentrado de pollo (opcional)
- Sal y pimienta
ELABORACIÓN
1. En primer lugar preparamos las albóndigas. Ponemos la rebanada de pan de molde a remojar con un poco de leche, para que se ablande.
2. En un bol, ponemos la carne picada con el huevo, el ajo bien picado, el pan de molde cuando esté blando y salpimentamos. Removemos bien la mezcla con las manos muy limpias, hasta que esté todo integrado.
3. Añadimos el pan rallado poco a poco, mezclando bien para ir viendo si necesita más cantidad.
4. Cuando tengamos todo bien mezclado, nos ayudamos de una cuchara para coger porciones y formar bolitas del tamaño que nos guste.
5. Pasamos las albóndigas por un poco de harina y las vamos dejando sobre un plato.
6. Ponemos la freidora a calentar o una sartén honda con suficiente aceite para freír, y cuando esté caliente, vamos poniendo las albóndigas, friéndolas bien por todos los lados. Cuando estén doradas, las sacamos y dejamos escurrir sobre papel de cocina para que absorba el aceite sobrante.
7. A continuación, vamos a pelar y lavar bien las patatas. Las cortamos a cascos, es decir, hay que chasquear las patatas, metemos el cuchillo y tiramos hacia fuera para romper un trozo de patata. No hay que cortar. Vamos poniendo las patatas en agua mientras terminamos de cortarlas todas.
8. En una olla (nosotras hemos usado la olla rápida), ponemos un poco de aceite, y añadimos la hoja de laurel para freírla. Cuando esté frita y haya soltado el aroma, la sacamos.
9. Sobre ese mismo aceite, añadimos el ajo picado y la cebolla cortada en cuadraditos pequeños y lo pochamos todo unos minutos.
10. Después, añadimos la harina y rehogamos para que se cocine. Seguidamente ponemos el pimentón y echamos las albóndigas, removemos todo para que se impregnen bien.
11. Escurrimos las patatas de agua y las añadimos a la olla. Vertemos agua hasta casi cubrir por completo.
12. Añadimos media cucharadita de nuez moscada, una pizca de colorante amarillo (del de las paellas) y opcionalmente una pastilla de caldo concentrado (en casa no lo usamos mucho, pero los compramos ecológicos, que vienen sin glutamato monosódico ni ningún aditivo químico).
13. Ya sólo queda tapar la olla y dejar cocer hasta que la patata esté hecha y las albóndigas queden más blanditas. En la olla rápida nos tardó unos 20 minutos.
14. ¡Y listo! Un plato delicioso que si lo hacéis veréis que no es difícil ni se tarda tanto, a pesar de todos los pasos que os hemos contado en la receta.
¡Que tengáis buen día! Volveremos con más recetas :D
¡¡Muaaaaaaaaaks!